Juan Soto tomó decisión correcta al no firmar extensión de contrato con los Nationals

La temporada que ha tenido Juan Soto en su segundo año con los Padres, sumado a las situaciones que se han presentado en la organización de Washington, es prueba suficiente para establecer que el dominicano no se equivocó al rechazar la oferta de extensión contractual.

Para muchos fue una sorpresa cuando Juan Soto admitió que reportes que apuntaban hacia que Washington Nationals le hizo una importante oferta de extensión contractual, la cual superaba los 400 millones de dólares por quince años, era cierta. Para todos fue más impactante cuando “La Fiera” reveló que había rechazado dicha oferta.

Desde entonces, fanáticos, expertos, exjugadores y miembros de la prensa han expresado diversas opiniones sobre la situación, siendo el consenso “generalizado”, que a ‘ningún equipo se le rechazan 400 millones’, parafraseando a David Ortiz, quien fuese el último nombre de relevancia que se refirió al asunto durante 2023.

Soto ha sido claro de que el tema con los Nationals y la oferta es algo del pasado y que su enfoque completo está en ayudar a los Padres, sin embargo, desde que se hizo público el rechazo de la oferta, el dominicano ha estado bombardeado por críticas constantes con respecto a su desempeño, algunas merecidas, tras lo hecho en 2022 y otras completamente inmerecidas, las cuales han surgido independientemente del gran año que está teniendo.

De hecho, es común ver comentarios de que Soto no es un pelotero de 400 millones”, comparaciones con otros jugadores que están teniendo mejor año, en términos generales y opiniones que buscan denostar una campaña que al momento es de 35 cuadrangulares con 108 vueltas remolcadas, un promedio de bateo de .276 con un OPS de .935 y un OPS+ de 159 (el segundo más alto de su carrera, sin contar la temporada recortada por COVID).

Soto sigue siendo un jugador preciso en la zona de strikes, lo que se demuestra con su liderato en bases por bolas para la campaña 2023.

Mientras, del otro lado del espectro, está Washington.

Un equipo que nuevamente va rumbo a uno de los peores récords de Grandes Ligas, el cual estuvo envuelto en rumores de venta, de manera momentánea y está envuelto en situaciones poco halagüeñas con sus jugadores, como es el caso de Stephen Strasburg, a quien, supuestamente, se le haría una ceremonia de retiro, pero que el equipo posteriormente dijo que no era cierta.

El tema con los Nationals es que por más críticas que pueda recibir Soto, es un equipo que no ha sido exitoso reteniendo a sus estrellas. Empezando con nombres como Bryce Harper o Trea Turner, quienes iniciaron su carrera en Washington y pasaron por la agencia libre, pero decidieron no regresar, lo mismo que ocurrió con Anthony Rendon (independientemente de sus resultados con Los Angeles Angels). Otros nombres como el de Max Scherzer, quien fue objeto de cambio y luego, al volverse agente libre, tampoco vio a Washington como un destino deseable para jugar.

Más allá de las razones que cada uno de esos peloteros tuvo para no volver al equipo, la realidad se hace evidente, Soto no se equivocó al decirle que no a los Nationals. Su rendimiento ha regresado a niveles extraordinarios y se proyecta a cobrar salarios que totalizan cerca de 70 millones de dólares desde su llegada a los Padres, lo que quiere decir que con una extensión más corta en cuanto a años y una suma de dinero inferior, podría fácilmente superar lo que le ofrecieron los Nationals.

Independientemente de la opinión que se tenga sobre el conjunto o sobre el jugador, es claro quién salió ganando de la separación definitiva entre ambos.ESPN