Representantes del grupo ITM, quiénes pretenden invertir en el Puerto Cabo Rojo, dieron a conocer este lunes el nuevo diseño del proyecto que el cual contempla la reubicación del pasto marino.
Los ejecutivos del grupo de inversión extranjera explicaron que presentará próximamente el nuevo diseño a los grupos ambientalistas, residentes en Pedernales y al Ministerio de Medio Ambiente para su autorización.
Marina Perillat, Vicepresidente corporativo del Grupo explicó que la compañía tienen una concesión con la Autoridad Portuaria pretende inicial la construcción de la primera fase en diciembre con una inversión de 100 millones de dólares.
El proyecto propuesta para el Estudio de Impacto Ambiental en Cabo Rojo, consiste en un espigón de 670 metros en la zona sur del cabo, en vez de dos espigones que contemplaba el diseño anterior.
Esta iniciativa tendrá la capacidad de atracar cuatro embarcaciones de manera simultánea, en las que arribarán más de 1 millón de turistas al año con un gasto promedio de entre 80 y 100 USD por pasajero detalló Perillat.
Señaló que esta obra se contemplan detonar para la fase de obra mil 500 empleos directos e indirectos y en la fase de operación alcanzará entre mil 500 y dos mil 160 empleos indirectos, inyectando movilidad y derrama económica para las provincias fronterizas.
Además de los 1,500 y 2, 180 empleos directos e indirectos que se proyecta generación de empleos.
De su lado Alonso Reyes, biólogo marino y experto técnico de la empresa señaló que el sitio en el que se proyecta esta nueva posición se encuentra compuesta en su mayoría por arena, pastos marinos e inclinaciones que se dirigen al cañón submarino ubicado al centro de la bahía y que será utilizado para el tránsito de los barcos.
El proyecto también considera la reubicación de pastos marinos, pequeñas colonias de corales, esponjas, estrellas de mar, pepinos, erizos y caracoles como parte de las medidas de compensación y mitigación que el Ministerio de Medio Ambiente prevé para este tipo de construcciones.
La empresa dijo que han convocado a representantes de organizaciones ambientales y del Ministerio de Medio Ambiente a un levantamiento subacuático para observar las áreas que se proyectan para la ejecución de la terminal de cruceros.