El huracán Hilary, que previamente era de categoría 4, se ha degradado a categoría 3 mientras se dirige hacia la península de Baja California, en el noroeste de México. Aunque su intensidad ha disminuido, se espera que aún cause fuertes lluvias e inundaciones tanto en México como en parte del sur de California, Estados Unidos.
Las autoridades meteorológicas mexicanas han emitido pronósticos de lluvias intensas con descargas eléctricas y posibles inundaciones en gran parte del país. También se ha advertido sobre el alto oleaje y el riesgo de desbordamiento de ríos y arroyos. Se espera que Hilary provoque condiciones peligrosas para la población, a pesar de haber sido degradado a categoría 3.
En Los Cabos, un destino turístico popular en Baja California, se han tomado medidas de precaución, como colocar sacos de arena y resguardar muebles y enseres. El gobierno ha implementado un plan de contingencia que incluye la presencia de militares para asegurar la seguridad en la zona. Además, la Comisión Federal de Electricidad ha desplegado recursos para atender posibles cortes de energía en la región.
Hilary se espera que siga avanzando hacia el noroeste de México y que se acerque a la costa oeste de la península de Baja California durante el fin de semana. Luego, se prevé que afecte al sur de California en Estados Unidos a partir del domingo. A pesar del debilitamiento, se espera que el huracán aún presente riesgos significativos para las áreas afectadas.
México está acostumbrado a lidiar con ciclones tropicales durante la temporada de huracanes, que generalmente ocurre entre mayo y noviembre. Estos eventos naturales pueden traer consigo vientos fuertes, lluvias intensas y posibles inundaciones que requieren una preparación cuidadosa y una respuesta coordinada por parte de las autoridades y la población.