Jesse Kipf, residente de Kentucky, enfrenta ahora una pena de prisión tras admitir haber fingido su propia muerte para eludir el pago de hasta 100.000 dólares en manutención infantil a su exesposa.
El hombre de 39 años confesó haber llevado a cabo este engaño al acceder al sistema de registro de defunciones en Hawái en enero de 2023, utilizando información robada a un médico del mismo estado. Posteriormente, creó un archivo a su nombre en el sistema y utilizó los detalles del médico para certificar su propia muerte.
De acuerdo con un acuerdo de culpabilidad, Kipf se asignó a sí mismo como el certificador médico del caso y lo certificó como fallecido. Este acto ilícito lo llevó a ser arrestado y está programado para ser sentenciado el 12 de abril.
El hombre se declaró culpable de múltiples cargos, incluido el acceso ilegal a sitios web administrados por los estados de Arizona y Vermont, así como por GuestTek Interactive Entertainment y Milestone, Inc. Sus acciones también incluyeron daños a redes informáticas y robo de identidades de numerosas personas.
Kipf admitió haber hackeado redes privadas de empresas, entidades gubernamentales y corporativas utilizando información robada, con la intención de vender acceso a estas redes a compradores en línea, según los documentos judiciales.