Resulta que ni siquiera la propia fuerza laboral de Google está muy convencida de las afirmaciones de la compañía sobre las protecciones de privacidad del modo de incógnito de Google Chrome. Según informes recogidos por Bloomberg, los empleados bromean sobre protecciones de privacidad ineficaces y potencialmente engañosas.
Un jefe de marketing de la compañía envió un correo electrónico directamente al CEO Sundar Pichai, básicamente rogándole que hiciera que el producto realmente estuviera a la altura de su nombre según documentos judiciales hechos públicos recientemente. Esas bromas y críticas internas surgen en medio de múltiples demandas que cuestionan la transparencia de Google en torno a la función del navegador más usado del mundo.
En un correo electrónico enviado a Pichai, la jefa de marketing de Google, Lorraine Twohill, advirtió que la confusión actual de los clientes sobre el modo incógnito estaba obligando a la empresa a hacer malabares usando un lenguaje confuso que, en última instancia, corre el riesgo de degradar la confianza del consumidor. “Haz que el modo de incógnito sea verdaderamente privado”, escribió en el correo electrónico.
Vale la pena señalar que Twohill envió ese correo electrónico después de que varios usuarios presentaran una demanda colectiva multimillonaria contra Google precisamente por rastrear a los usuarios mientras usaban Modo Incognito. Los firmantes de la demanda afirman que el supuesto seguimiento equivale a violaciones de la privacidad. El juez encargado del caso se negó a permitir que los demandantes interrogaran a Pichai en los procedimientos previos al juicio a pesar de las conexiones del CEO en el desarrollo de Google Chrome, y de los correos electrónicos posteriores sobre Incognito.
Retrocedamos por un segundo para clarificar un punto. La llamada navegación de incógnito de Google Chrome oculta el historial de búsqueda a otras personas que usan el mismo dispositivo, pero en realidad no impide que Google o sus amigos anunciantes inicien sesión y se beneficien de tu historial de búsqueda. Los críticos de Incognito, como los participantes en la demanda colectiva y, más recientemente, el fiscal general de Texas, Ken Paxton, argumentan que la marca y los mensajes de Google en torno a Incognito hacen que parezca que preserva mucho más la privacidad de lo que realmente hace. Paxton, en particular, alega que las representaciones de la compañía sobre el modo de incógnito son “falsas y engañosas”.
Google, por su parte, niega enérgicamente esas objeciones. “Los controles de privacidad se han incorporado durante mucho tiempo a nuestros servicios y alentamos a nuestros equipos a discutir o considerar ideas constantemente para mejorarlos”, dijo un portavoz de Google en un correo electrónico a Gizmodo. “El modo de incógnito ofrece a los usuarios una experiencia de navegación privada, y hemos sido claros sobre cómo funciona y qué hace, mientras que los demandantes en este caso han tergiversado deliberadamente nuestras declaraciones”.
Google, según los documentos judiciales vistos por Bloomberg, también argumenta que es de conocimiento común que el modo de incógnito no ofrece invisibilidad total en la web y dice que los usuarios dan su consentimiento cada vez que usan el servicio. Mientras tanto, documentos judiciales adicionales obtenidos por Bloomberg muestran que otros empleados comparten el sentimiento de Twohill. “Debemos dejar de llamarlo Incógnito y dejar de usar un ícono de Spy Guy”, dijo un ingeniero en un chat de 2018.
Según los informes, el ingeniero citó investigaciones disponibles públicamente que mostraban que los usuarios realmente no entendían cómo funcionaba la función. Otro empleado respondió con frivolidad publicando un wiki en la página de “Guy Incognito” de Los Simpson, quien, aparte de un pequeño bigote, se ve idéntico a Homer Simpson.
Ese disfraz cutre, según el empleado, “transmite con precisión el nivel de privacidad que proporciona [Incognito]”. Según los informes, un líder de producto de Google Chrome incluso propuso modificar la página de inicio de incógnito para que diga “NO está protegido de Google” en lugar de “Está protegido de otras personas que usan este dispositivo”.
No hace falta decir que Google arruinó esa idea. Para crédito de la compañía, la página de inicio de incógnito de Chrome sí que proporciona algunos detalles importantes sobre las limitaciones de las funciones, pero la investigación muestra que esas notas, algunas de las cuales requieren hacer clic en una pestaña adicional de “aprender más”, no calan en el usuario.
El 56,3% de los participantes en un estudio de 2018 realizado por investigadores de la Universidad de Chicago y la Universidad Leibniz de Hanover, por ejemplo, dijeron que creían que Incognito evita que Google vea su historial de búsqueda. No lo hace. Otro 37% pensaba que Incognito podía evitar que sus empleadores los rastrearan, lo que tampoco es exacto. En realidad, el modo de navegación privada, según Daniel Markuson de Nord VPN, “solo impide que el propio navegador registre el tráfico. No oculta tu IP.” A diferencia de las VPN que encriptan el tráfico, Markuson dice que Incognito simplemente borra el historial de navegación y elimina las cookies cuando los usuarios cierran un navegador.
“Su ISP y empleador, sitios web, motores de búsqueda, gobiernos y otros fisgones de terceros aún pueden recopilar tus datos y rastrear tu dirección IP”, escribe Markuson. “Google ofrece una forma bastante decente y mema de proteger tu privacidad, pero no es muy sofisticada y no cubre muchas de las técnicas que los rastreadores usan para recopilar datos”, explicó anteriormente a Gizmodo el tecnólogo de la Electronic Frontier Foundation, Bennett Cyphers. El tribunal federal de California pronto se pronunciará al respecto.