El príncipe Harry y Meghan Markle tenían previsto finalizar hoy jueves el periplo que les ha llevado a Reino Unido y Alemania, donde han participado en diversos compromisos. Sin embargo las noticias acerca del estado de la reina Isabel les ha llevado a cambiar sus planes.
“Después de una completa evaluación esta mañana, los médicos de la Reina están preocupados por la salud de Su Majestad y le han recomendado que permanezca bajo supervisión médica. La Reina está tranquila en Balmoral». Este es el breve comunicado con el que el Palacio de Buckingham ha informado del estado de salud de Isabel II.
La soberana británica se encuentra muy delicada y así ha quedado patente durante estas últimas semanas en las que ha permanecido en Balmoral, su residencia de verano que ha sido adaptada a sus problemas de movilidad para que estuviera lo más cómoda posible.
Los miembros de la Familia Real ya han sido informados de la situación, de hecho, tanto el príncipe Carlos como la duquesa de Cornualles y el príncipe Guillermo, la princesa Ana y los príncipes Eduardo y Andrés han viajado al Castillo de Balmoral, que se encuentra situado en el concejo de Aberdeenshire, en Escocia, para estar junto a ella. Los duques de Sussex también se han trasladado hasta allí desde Londres, tal y como ha informado su portavoz. En la capital británica es donde tenían previsto finalizar su viaje -iban a estar en los premios WellChild- antes de regresar a California.
La relación de Harry y Meghan con el resto de la familia ha estado marcada por la tensión desde que se desvincularan de sus deberes institucionales en 2020, sin embargo el príncipe Harry ha seguido cerca de su abuela a la que adora, visitándola cuando ha estado en el Reino Unido. La última vez que los duques de Sussex estuvieron con ella fue el pasado junio con motivo de las celebraciones del Jubileo de Platino de Isabel II. En el mes de abril, transcendió que el príncipe Harry y Meghan mantuvieron un encuentro privado con Isabel II en Londres del que Harry comentó que había sido «genial».