En cuanto a los ingresos, el presupuesto prevé un total de 1,330,737,621,591 pesos dominicanos. De esta cifra, 1.329.763.461.153 pesos corresponden a ingresos corrientes consolidados, mientras que los ingresos de capital consolidados suman 974.160.438 pesos. Estas cifras generaron preocupación en los opositores, quienes cuestionaron la viabilidad de los ingresos proyectados para cubrir los gastos del Estado.
El presupuesto también contempla un gasto significativo en proyectos de infraestructura y desarrollo, con un total de 176,037,926,167 pesos destinados a gasto de capital. Por otro lado, el gasto corriente asciende a 1.308.196.684.792 pesos. Además, el presupuesto asigna una parte considerable de los recursos a los pagos financieros, con 108.120.510.535 pesos destinados al pago de intereses.
En términos de desgloses, los ingresos por impuestos se componen principalmente de los ingresos corrientes consolidados, que suman 1,329,763,461,153 pesos, y los ingresos de capital consolidados, que ascienden a 974,160,438 pesos.
Este presupuesto fue presentado a la Cámara de Diputados a finales de septiembre, pero el análisis por parte de los legisladores comenzó casi dos meses después, bajo la presidencia del diputado Francisco Javier Paulino, quien encabezó la comisión bicameral encargada de su estudio.