Karen Diamond, de 82 años, falleció este lunes tras no recuperarse de las graves heridas sufridas durante un ataque con cócteles molotov perpetrado el pasado 1 de junio contra una manifestación en Boulder, Colorado, a favor de la liberación de rehenes israelíes en Gaza.
El atentado ocurrió en un parque de esa ciudad, durante una actividad organizada por el movimiento “Run for Their Lives”. Las autoridades estadounidenses calificaron el hecho como un acto de odio, y confirmaron que el sospechoso, Mohamed Sabry Soliman, de 45 años y de nacionalidad egipcia, enfrenta más de 100 cargos criminales federales y estatales.
Con el fallecimiento de Diamond, la fiscalía del condado de Boulder anunció que añadirá el cargo de homicidio en primer grado al expediente judicial. “Este horrible ataque cobró ahora la vida de una persona inocente, amada por su familia y amigos”, expresó el fiscal distrital Michael Dougherty.
Además del cargo por homicidio, Soliman fue acusado de uso de artefactos incendiarios, intento de homicidio (52 cargos), asalto en primer y tercer grado, crímenes de odio y crueldad animal, ya que un perro resultó herido durante el atentado.
Según la investigación, el atacante gritó “¡Palestina libre!” mientras lanzaba dos cócteles molotov contra los manifestantes. Posteriormente, las autoridades hallaron en su vehículo un manuscrito con mensajes antisionistas, en el que calificaba a Israel como una “entidad cancerígena”.
Soliman, quien residía ilegalmente en el país tras exceder su visa de turista, también confesó que buscó manifestaciones “sionistas” en internet y decidió atacar tras identificar el evento de Boulder como tal.
El número total de víctimas aumentó a 29 personas, con edades entre 25 y 88 años, según el más reciente informe del Ministerio Público local.