Ha sido un año muy intenso para Eugenio Derbez. De hecho estuvo un par de veces en su casa en lo que va de 2022 antes del accidente. Ambas han sido para buscar ropa y cambiar maletas y así continuar con sus compromisos laborales, pero un contratiempo o mejor dicho, un accidente, hizo que frenara en seco ese ajetreo al que se había estado sometiendo, tanto de manera consciente como inconsciente durante estos últimos seis meses.
Y es que a pesar de que estaba muy feliz por todo lo que vivió desde principios de año con su película CODA, con todos los premios que se llevó la misma y con todas las ceremonias a las que asistió al lado del elenco y sus esposa Alessandra incluida la ceremonia del Oscar, la gira de promoción que hizo con la cinta El Valet y tres series más para la televisión al final de todo esto, el cuerpo de Eugenio ya le pedía un descanso. El universo le pedía que le metiera freno a la carrera en la que estaba metido de lleno.
Realmente, Eugenio Derbez necesitaba tener un descanso en casa para compartirlo con su pequeña hija Aitana y con su esposa Alessandra, pero el “descanso” se lo tomó a medias y poniéndose en riesgo al lado de su hijo Vadhir y lo peor es que fue estando lejos de casa.
Para nadie es un secreto que Derbez es amante de la adrenalina. Así lo hemos podido ver en los reality que ha compartido en las plataformas de streaming cuando ha estado de vacaciones con la familia. Estar descansando en los tiempos libres nunca ha sido una opción para Derbez y en las vacaciones, mucho menos. Hasta en medio de la pandemia creó contenido para las plataformas de streaming.
Incluso en esta última ocasión, un día antes del accidente que sufrió, y el cual hoy lo mantiene convaleciente en cama, Eugenio estuvo con su hijo en un río lleno de cocodrilos tomando videos de estos animales. Y aunque no le pasó nada, la actividad no dejaba de ser riesgosa.
Una noche antes de volver a su casa en Los Ángeles, estando en un pueblo de Georgia, su hijo Vadhir lo convenció de experimentar con un juego de realidad virtual. Y fue ahí, en ese preciso momento que comenzó todo este calvario que lo mantiene postrado en cama, casi todo el tiempo bajo sedantes.
En una transmisión en vivo vía Instagram a través de la cuenta de Eugenio Derbez, su esposa, la actriz y cantante Alessandra Rosaldo, asistió al comediante para hablar por primera vez con sus seguidores desde el accidente y mientras continúa a cabalidad con su proceso de recuperación.
Este domingo, los fans de Derbez lo vieron transmitiendo en vivo acostado en su cama, con la mirada cansada producto de los sedantes a los que se ha tenido que someter desde el accidente.
Eugenio se comunicó con su público de manera virtual, quienes se desbordaron en compartir palabras de aliento hacia el actor mexicano a través del espacio de comentarios. El enlace tuvo una duración de algo más de 20 minutos y a través del mismo, Derbez comenzó su comunicación agradeciéndole a su público las muestras de cariños que le han mostrado a través de las redes. “Estoy muy conmovido, gracias a toda la gente, a los fans, a los medios que han estado pendientes”, dijo Derbez, quien agregó que ha agarrado muy poco su celular para ver los mensajes.
A pesar de que sus ganas de hacerlo eran inmensas, también era evidente que su cuerpo se mostraba agotado. Pero aún así, no perdió su chispa y el buen humor que lo caracteriza, pero lo hizo con esfuerzo. “Siempre me han dicho y creo que las cosas pasan por algo…. El agua pasa por las tuberías”, dijo Eugenio en tono de broma antes de explicar las verdaderas razones que, según su criterio, fueron las causas del hecho que hoy lo mantienen con el brazo derecho totalmente inmovilizado y tomando reposo obligatorio y necesario en casa.
“Yo creo que esto que me pasó fue para algo y estoy tratando de encontrar el para qué fue. Creo que tiene mucho que ver con que fue un año muy ocupado”, dijo frente a la cámara que estaba operando su esposa.
Derbez dijo que estaba muy feliz por el trabajo que había tenido, pero que se sentía un poco ahogado, incluso confesó que se sentía como en “la cárcel, de no tener vida ni poder tener días libres ni eso… una vida”.
“Creo que este accidente pasó por eso, de alguna manera era el universo o quizá mi alma pidiendo parar, nomás que sí se le pasó la mano, la verdad”, aceptó Derbez con ánimo de explicándole a su público, pero el cuerpo no le permitía hacerlo de una manera más amena como es su costumbre.
Tras dar a conocer lo que podría haber sido la razón de lo que hoy está viviendo, llegó el momento que todos estaban esperando. “El hecho es que faltando un día para regresar a mi casa, después de todos esos meses de trabajo fuera, fue cuando me sucedió esto”, dijo.