Los agentes federales fueron al departamento del individuo detenido con una orden de registro. Al preguntarle si había alguien más en casa, el individuo respondió de manera inquietante, diciendo: «solo mis amigos muertos». Esta respuesta sugiere que el individuo podría estar implicado en actividades o situaciones relacionadas con la muerte. Es importante que las autoridades investiguen y tomen las medidas necesarias para garantizar la seguridad de todas las personas involucradas.
El hallazgo de 40 cráneos humanos y otros restos como decoración en la casa de James Nott en Kentucky, Estados Unidos, ha llevado a vincularlo a una red de compra y venta de partes del cuerpo. Se ha revelado que un gerente de la morgue de la Escuela de Medicina de Harvard, llamado Cedric Lodge, también estaba involucrado en esta red. Lodge robaba partes de cadáveres y las vendía en Internet. Ambos individuos enfrentan cargos federales por sus acciones.
El descubrimiento de estos cuerpos humanos ha generado un impacto significativo, y se han encontrado conexiones con otros compradores y vendedores involucrados en el tráfico ilegal de restos humanos. Algunos compradores utilizaban los restos con fines decorativos, mientras que otros parecen haberlos empleado en actividades relacionadas con el horror o la subcultura zombie.
Estos hechos son perturbadores y constituyen delitos graves. Las autoridades correspondientes están llevando a cabo una investigación exhaustiva para desmantelar por completo esta red y asegurarse de que los responsables sean llevados ante la justicia. El tráfico de partes del cuerpo humano es ilegal y va en contra de los principios éticos y morales más fundamentales.