El trágico hallazgo del cuerpo mutilado de Eduarda Díaz en unos matorrales de San Cristóbal ha conmocionado a sus seres queridos y a la sociedad en general. Eduarda, en el momento de su muerte, estaba embarazada de cinco meses y tenía un hijo de siete meses con su agresor, quien resultó ser su ex pareja, José Osvaldo Cuevas.
Los familiares de Eduarda han revelado que previamente habían denunciado los constantes abusos sufridos por ella a manos de su agresor en la fiscalía, pero lamentablemente no se pudo evitar esta tragedia. Ahora, exigen justicia y una pronta respuesta de las autoridades frente a este feminicidio atroz.
Después de dos años de relación con Cuevas, Eduarda se convirtió en la víctima de un crimen despiadado. Su cuerpo desmembrado fue abandonado en bolsas negras entre los matorrales del sector La Conga de Ingenio Nuevo en San Cristóbal, dejando a sus familiares en un profundo dolor.
Eduarda deja tres hijos en la orfandad, mientras que su agresor está detenido y será sometido a la justicia en las próximas horas. Los restos de Eduarda serán llevados al cementerio municipal de Yaguate para su sepultura.
Este feminicidio es un recordatorio escalofriante de la violencia de género que persiste en nuestra sociedad y la urgente necesidad de tomar medidas para proteger a las mujeres y prevenir tragedias como esta.