El presidente Joe Biden recibió al expresidente Donald Trump este miércoles en la Casa Blanca para una reunión en el Despacho Oval, un acto tradicional en el traspaso pacífico de poder. Hace cuatro años, Trump había optado por no participar en esta ceremonia.
Melania Trump, la próxima primera dama, no acompañó a Trump en su visita para la reunión con Biden en la Casa Blanca.
Mientras Trump se reunía con Biden, sus seguidores recibieron un correo electrónico titulado “Trump está dentro de la Casa Blanca”. Este mensaje de recopilación indicaba que “el presidente Trump está en una reunión muy importante en la Casa Blanca” e invitaba a los seguidores a llenar una encuesta en línea para definir sus prioridades.
La operación de recaudación de fondos de Trump ha sido conocida por alinear sus mensajes con momentos estratégicos, como su aparición en escenarios públicos o, anteriormente, durante citas legales en la corte.
Trump aterrizó en su jet privado, conocido como Trump Force One, en la base aérea Andrews en Maryland a las 9:25 am hora local. Este avión, identificado con su característico nombre en letras grandes sobre fondo azul oscuro y franja roja, simbolizó su retorno a la capital tras la reciente victoria electoral.
Posteriormente, Trump se dirigió al Capitolio para reunirse con los republicanos de la Cámara de Representantes y su líder, Mike Johnson.
Durante su primer período presidencial, de 2017 a 2021, Trump contó con el control del Congreso gracias a una mayoría republicana. Ahora, el escenario parece repetirse, con el Partido Republicano recuperando el Senado y manteniendo la mayoría en la Cámara Baja.
A las 11:00 am, Trump celebró un encuentro con Biden en el Despacho Oval. Este evento, de gran simbolismo para la democracia de Estados Unidos, reafirma la importancia de una transición ordenada de poder. Solo un grupo selecto de medios tuvo acceso a las declaraciones iniciales, mientras el resto de la reunión se realizó a puerta cerrada.