Embajador ruso en RD exige responsabilidad de Occidente ante situación haitiana

El embajador de la Federación Rusa en República Dominicana, Alexey Victorovich, manifestó este jueves su inquietud ante la crisis que vive Haití y señaló que las potencias occidentales con antecedentes de intervención en ese país deben asumir una mayor responsabilidad en la situación actual.

“El pueblo haitiano debe ser quien resuelva sus propios problemas, incluyendo la celebración de elecciones y referéndums”, destacó el diplomático, al tiempo que señaló que las naciones con un legado de colonialismo e injerencia a las que se refirió como responsables de “intromisiones de cientos de años” no pueden desligarse de la crisis que atraviesa el país caribeño.

Victorovich también dirigió críticas hacia los países que impulsaron la misión internacional que actualmente opera en Haití, alegando que no han cumplido con las promesas de financiamiento. “Tienen que asumir más responsabilidad financiera”, reclamó, e instó a que se honren los compromisos pactados para mantener la operación activa.

En su intervención, el embajador apuntó directamente a Estados Unidos como parte del conflicto, señalando que gran parte del armamento ilegal que llega a las bandas haitianas proviene de la Florida. “Todo el mundo sabe que el flujo de armas hacia Haití pasa por allí. Deben combatir ese contrabando y también aportar más recursos económicos para estabilizar al país”, expresó.

Adoptando un tono crítico, también cuestionó las acciones unilaterales de países occidentales en regiones como Medio Oriente, Libia, Irak e Irán, las cuales, según indicó, se llevaron a cabo sin aprobación del Consejo de Seguridad de la ONU. “Desembolsaron miles de millones para la guerra en Ucrania, pero deberían preocuparse más por Haití y apoyar económicamente a ese país pobre”, concluyó.

Estas declaraciones surgen en un contexto en el que la comunidad internacional intenta apoyar la recuperación institucional y humanitaria de Haití, que atraviesa una crisis profunda bajo un gobierno provisional y con el respaldo de una misión multinacional encabezada por Kenia.