El extraño caso de los usuarios que compran cámaras en Amazon y reciben comida de gatos

A comienzos de este año, la BBC contó la historia de un cliente de Amazon que había comprado un iPhone y recibió comida para perros. Sorpresivamente para la cadena británica, ha tenido continuidad con la llamada de muchos lectores con historias similares.

Tal y como cuenta la BBC en el nuevo artículo, hay un denominador común en todas estas quejas: se trata de clientes de Amazon que pidieron a través del minorita productos electrónicos de alto valor, tipo cámaras de fotos o equipos informáticos, y que se convirtieron en comida para gatos o incluso máscaras faciales a la llegada a la vivienda.

Por ejemplo, una de las historias habla de un hombre llamado Jonathan que entró “en pánico” después de pedir una cámara Sony Alpha 6400 y un teleobjetivo Tamron y recibir una bolsa de comida para gatos en su lugar. “No me lo podía creer, y estaba muy ansioso porque sabía que no iba a ser fácil recuperar mi dinero”, explica al medio tras pagar 1.420 libras por ambos productos.

Lo cierto es que Jonathan no iba muy desencaminado, ya que Amazon inicialmente se negó a reembolsarle, ya que había aceptado el paquete y le había dado al conductor el código de seguridad que lo acompañaba porque el paquete parecía del tamaño esperado. Afortunadamente, después de varios intentos y llamadas, se reemplazó la lente y le reembolsaron la cámara porque estaba agotada. Cuando la BBC se puso en contacto con Amazon sobre esta historia, les respondieron:

Lamentamos que algunas experiencias de los clientes no hayan alcanzado los altos estándares que esperamos”

Otro cliente describió lo “devastado” que estaba su hijo al recibir máscaras quirúrgicas en lugar de una tarjeta gráfica para la que había ahorrado varios años. Este cliente dijo que pasó largas horas hablando por teléfono con Amazon y que solo se le permitió recibir un reembolso una vez que envió las máscaras a la empresa a su cargo.

Con todo, la peor de todas las historias que se contaron fue la de un fotógrafo que gastó nada menos que 1.999 libras en una cámara y lente Panasonic. Dicho equipo se envió a un stand de Amazon Hub. 

Al parecer, el cliente tuvo cuidado de abrir el paquete a la vista de la cámara de seguridad del Hub y… encontró dos pares de zapatos en la caja. A pesar de los múltiples intentos de obtener un reembolso, incluido informar a Amazon que tiene evidencia en video del incidente, no tuvo éxito y tuvo que recurrir a presentar una disputa de cargos con su banco.