ST. LOUIS – Allí estaba Sandy Alcántara, sentado en la parte final de la banca, con una toalla alrededor de su cuello, viendo con intensidad cómo sus compañeros le daban la vuelta a la pizarra. Lo único que quería el dominicano era la oportunidad de completar las nueve entradas.
El miércoles por la noche, parecía que no tendría ese chance, con su equipo abajo por una carrera en la novena entrada.
Pero gracias a un jonrón de dos carreras del venezolano Avisaíl García, a un out de la derrota, se le abrió la puerta al dominicano para el juego completo.
“Tenemos a nuestro as en la lomita”, dijo García. “Si anotamos carreras para Sandy, tenemos oportunidad de ganar. Es dominante. Es uno de los mejores”.
En el último tramo, Alcántara regaló un boleto y permitió un hit con un out, haciendo que el manager Don Mattingly saltara de inmediato hacia la loma.
“No quería sacarlo, pero sí saber cómo se sentía”, señaló el piloto. “Le pregunté eso y me dijo que lo tenía [resuelto]. No le iba a prometer dos bateadores, pero sí uno más”.
“Cuando vino hacia mí, le dije: ‘Lo tengo, lo tengo, lo tengo’ y se fue”, señaló Alcántara. “Debido a la confianza que creo que tiene en mí, sabía que podía terminar el juego”.
Y eso fue lo que hizo. El panameño Edmundo Sosa bateó para doble matanza, para la victoria de Miami 4-3 sobre San Luis. Fue el segundo juego completo para Alcántara en el año (líder en Grandes Ligas) y el quinto de su carrera. Para hacerlo, alcanzó un tope personal de 117 pitcheos.
Alcántara, de 26 años, sigue solidificando su caso para ser el abridor de la Liga Nacional en el Juego de Estrellas. Ha lanzado 115.1 tramos a lo largo de 16 aperturas – la mayor cantidad desde que el quisqueyano Johnny Cueto y Clayton Kershaw lo hicieron en el 2016. Ha completado al menos siete innings en cada una de sus últimas 10 aperturas – la racha más larga desde Rick Porcello a finales del 2016. Tiene la segunda mejor efectividad (1.95) en la Nacional y ha tirado casi 20 episodios más que cualquier otro lanzador.
El una vez sexto mejor prospecto de los Cardenales se ha convertido en uno de los mejores lanzadores abridores del juego – sino el mejor. Aunque siempre ha confiado en sus propias habilidades, Alcántara fue modesto cuando se le preguntó si había otro monticular mejor que él en este momento.
“No lo sé”, dijo con una sonrisa. “Hay muchos lanzadores buenos ahora mismo. Yo no tengo que decir que soy el mejor, pero tengo que seguir haciendo mi trabajo. Seguir positivo y compitiendo”.