«El culpable tiene que pagar», expresan los progenitores del pequeño fallecido en una guardería dominicana en Nueva York.

El pequeño Nicholas Feliz Dominici, quien estaría a punto de cumplir dos años en noviembre, falleció debido a lo que se presume fue una sobredosis de opioides en una guardería en El Bronx, a la que había comenzado a asistir la semana pasada. Su madre, profundamente afligida, compartió esta trágica noticia con los medios estadounidenses, revelando que este doloroso incidente también involucra a otros tres niños.

El hijo de Zoila Dominici y Otoniel Feliz aún estaba en proceso de adaptación a la guardería cuando él y sus tres compañeros, de edades comprendidas entre los ocho meses y los dos años, se enfermaron después de estar expuestos al fentanilo, un opioide sintético descubierto en las instalaciones de la guardería durante un allanamiento realizado el viernes.

«Nos recomendaron este lugar y aparentemente cumplía con todas las normativas. Estábamos en lista de espera para que nuestro hijo pudiera ingresar», expresó la madre del pequeño a CBS New York en español. Además, describió a su hijo como un niño muy inteligente que repetía todo lo que se le decía y que irradiaba amor. Todos quienes lo conocían lo apreciaban profundamente, incluidos nuestros vecinos, añadió.

El padre, en una entrevista con Univision, manifestó su total incredulidad ante la forma en que esta tragedia pudo haber ocurrido.