La Administración del presidente estadounidense Joe Biden ha instado a algunas de las principales economías consumidoras de petróleo del mundo, entre ellas Japón, China, Corea del Sur e India, a considerar la posibilidad de liberar reservas de crudo en un esfuerzo coordinado para reducir los precios mundiales de la energía, según informó Reuters este miércoles.
Según fuentes consultadas por el medio, desde la Casa Blanca se ha discutido la posibilidad de una liberación coordinada de petróleo almacenado con aliados como Japón, Corea del Sur e India, y también la inclusión de China.
De acuerdo al medio, esto reflejaría la frustración de Estados Unidos hacia los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados, que han rechazado repetidas solicitudes de Washington para acelerar sus aumentos de producción. «Estamos hablando del hecho simbólico de los mayores consumidores del mundo están enviando un mensaje a la OPEP de que ‘tienen que cambiar su comportamiento'», aseguró una de las fuentes citadas.
A pesar de la negativa de la organización a aumentar su producción, ya que aseguran que el repunte de la demanda podría ser frágil, la iniciativa de la Administración Biden representa un desafío sin precedentes debido al involucramiento de China, considerado el mayor importador de crudo del planeta, sugiere Reuters.
Para que este impulso tenga un efecto en el mercado, la participación estadounidense de cualquier posible liberación de reservas debería ser de más de 20 millones a 30 millones de barriles y podría consistir en la venta o un préstamo de la Reserva Estratégica de Petróleo de EE.UU., explicó una fuente que participó en las discusiones.
La última vez que se produjo una acción similar por parte de Estados Unidos y sus aliados fue en 2011, al inicio de la guerra civil en Libia, miembro de la OPEP.
Postura de los países involucrados
Un funcionario del Ministerio de Industria japonés afirmó que EE.UU. solicitó la cooperación de Tokio para lidiar con los altos precios del crudo, pero no confirmó si en la solicitud se encontraba el pedido de liberaciones coordinadas de reservas. Por ley, Japón no puede utilizarlas para manipular los precios, dijo el funcionario.
A su vez, la Oficina Estatal de Reservas de China aseguró que actualmente se estaba trabajando en ello, pero se negó a comentar acerca del pedido proveniente de la Casa Blanca.
En cuanto a un funcionario de Corea del Sur, sostuvo que se está «revisando a fondo la solicitud de Estados Unidos, sin embargo, no liberarán reservas de petróleo debido al aumento de los precios». «Podríamos liberar las reservas de petróleo en caso de desequilibrio del suministro, pero no para responder al aumento de los precios del petróleo», subrayó.
Luego de que trascendieran las discusiones en la Casa Blanca, el crudo estadounidense y el índice de referencia mundial Brent se desplomaron, cayendo este último por debajo de los 80 dólares el barril. En Asia, producto de la confirmación de que Pekín de estar trabajando en una liberación de crudo, los precios del petróleo también sufrieron caídas.
La inusual petición de Washington se produce en un momento en que Joe Biden se encuentra bajo presión debido al aumento de los precios de combustible impulsados por un repunte en la actividad económica pospandemia, una inflación récord en los últimos 31 años y la caída de su índice de aprobación.