Estados Unidos ha negado que un ataque aéreo estadounidense contra Al Shabab matara el pasado 15 de febrero a dos médicos cubanos retenidos por ese grupo yihadista en Somalia, tal y como aseguraron los terroristas.
Según un informe emitido este miércoles por el Mando Militar de EE.UU. en África (AFRICOM), el Ejército norteamericano confirmó que efectuó un bombardeo cerca de la localidad de Jilib (sur), donde supuestamente murieron los doctores, pero rechazó que ese ataque provocara el fallecimiento de los médicos.
“El 17 de febrero de 2024, el comando recibió un informe de un medio de comunicación digital que indicaba que dos civiles murieron como resultado de una operación militar estadounidense en las cercanías de Jilib, Somalia, el 15 de febrero de 2024”, afirmó AFRICOM.
“El comando completó una revisión de la información disponible y evaluó que el ataque aéreo estadounidense realizado el 15 de febrero de 2024 no provocó daños a civiles”, concluyó AFRICOM.
El pasado 17 de febrero, Al Shabab aseguró que dos médicos cubanos secuestrados por esa organización en 2019 habían muerto el día 15 de ese mes en un ataque aéreo del Ejército de Estados Unidos en Somalia, aunque esta información nunca ha sido confirmada oficialmente por las autoridades del país africano.
“El bombardeo aéreo, que empezó a alrededor de las 00.10 hora local (21.10 GMT), tuvo como objetivo una casa en Jilib y mató instantáneamente a Assel Herrera y a Landy Rodríguez, capturados el 12 de abril de 2019” en el norte de Kenia, aseguró el grupo yihadista en un comunicado.
En el comunicado aparecía también la supuesta fotografía de uno de los doctores cubanos presuntamente fallecidos.
El cirujano Landy Rodríguez Hernández y el especialista en medicina general Assel Herrera Correa fueron secuestrados el 12 de abril de 2019 en la ciudad keniana de Mandera (noreste), fronteriza con Somalia y objetivo de ataques yihadistas en el pasado.
Aquel día, los dos galenos se desplazaban, como era su costumbre, en un convoy al hospital de Mandera protegidos por escoltas armados, cuando fueron interceptados tras un tiroteo en el que falleció uno de los policías que velaban por su seguridad.
En mayo de 2019, líderes tradicionales de Kenia y Somalia que viajaron a la región somalí de Jubaland, controlada por Al Shabab, para negociar la liberación de de los facultativos, confesaron haber visto a los doctores prestando asistencia médica a la población local. Según los mediadores, los secuestradores llegaron a exigir 1,5 millones de dólares como condición para su liberación, informó entonces la prensa keniana