Un equipo de científicos alemanes ha publicado recientemente en la revista Nature Human Behaviour un estudio en el que determinan que la velocidad de procesamiento mental permanece casi constante hasta los 60 años, a diferencia de la creencia general de que nuestros cerebros se vuelven más lentos a medida que envejecemos.
«Nuestro hallazgo es alentador, ya que los resultados muestran que los niveles promedio de velocidad mental en contextos que exigen decisiones rápidas y forzadas no disminuyen hasta relativamente tarde en la vida», explica Mischa von Krause, autor principal del estudio.
Krause y sus colegas atribuyen la reducción percibida en la velocidad de respuesta a que las personas se vuelven más cautelosas a medida que envejecen, lo que explicaría por quá gran cantidad de investigaciones han concluido que la velocidad de procesamiento mental alcanza su punto máximo alrededor de los 20 años y sufre una disminución constante a partir de ese momento.
Para llevar a cabo el estudio se utilizaron datos de 1,1 millones de participantes de entre 10 y 80 años de edad, pertenecientes al Proyecto de Asociación Implícita de Harvard, una herramienta en línea que se ha utilizado para recopilar datos y educar a las personas en relación a los prejuicios sobre género, raza y otras características.
Los participantes en el test deben clasificar palabras en categorías positivas y negativas, al mismo tiempo que asignan imágenes a categorías raciales.
Los resultados del estudio, que se fijó en la edad de los participantes, sus tiempos de respuesta y su precisión, mostraron que el tiempo promedio para dar una respuesta correcta alcanzó su punto máximo alrededor de los 20 años.
Los investigadores sugieren que los jóvenes de esa edad eran los más rápidos, porque estaban más dispuestos a cambiar precisión por velocidad, mientras que la reacción puramente mecánica (la rapidez con la que una persona ve la pregunta y toca el teclado) fue más rápida entre los 14 y los 16 años.
Una disminución muy leve
Finalmente, la velocidad de procesamiento mental pareció alcanzar su punto máximo alrededor de los 30 años y disminuyó de forma muy leve entre los 30 y los 60. También se constató que los participantes también cometieron menos errores a medida que aumentaba su edad, al menos hasta los 60 años.
Joshua Hartshorne, psicólogo del Boston College (Massachusetts, EE.UU.), sostiene que estos resultados podría llevar a los psicólogos a reconsiderar algunos hallazgos anteriores que se basaban simplemente en los tiempos de respuesta.
«Esto se une a un cuerpo de trabajo que sugiere que la forma en la que las habilidades mentales cambian a lo largo de la vida es complicada y, realmente, no sabemos qué está ocurriendo», concluye Hartshorne. «Pero, pase lo que pase, definitivamente no es que alcancemos el punto máximo a los 20 y vayamos cuesta abajo desde allí».