De preocupante y dramática fue definida la situación que confrontan hace tres meses los residentes de la urbanización Caperuza II, de San Francisco de Macorís debido a la falta de agua potable.
Se quejan que la interrupción del servicio de suministro de agua potable comenzó en septiembre sin que a la fecha se vislumbre una solución.
Explican que para satisfacer sus necesidades de agua tienen que abastecerse de los servicios de camiones cisternas privados, que cobran mil ochocientos pesos por traslado.
Clamaron por una rápida intervención de las autoridades del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (INAPA), antes las cuales aseguran que han agotado todas las diligencias para que solucionen la carencia del vital líquido.
“Este problema se presenta desde hace tres meses; nunca la urbanización había atravesado por esa crisis de suministro de agua”, explicaron.
Revelaron que la interrupción del suministro de agua en la urbanización se produjo luego de que los trabajadores de una brigadas del INAPA instalaron una válvula en la calle Manuel Tapia Brea esquina H.
Otro factor que incide en la falta del vital líquido apunta a la rotura de una tubería en la avenida 14 de junio de la referida urbanización, donde diariamente se desperdician miles de galones de agua.
El doctor Nelson Antonio Abreu Tejada, periodista y abogado y quien habló junto a otros comunitarios, dijo que en 25 años nunca se había presentado una situación así y que el agua llegaba por gravedad.
Se quejó que en INAPA nadie le pone atención, al parecer porque el problema que afecta a los residentes en el lugar «no les interesa resolverlo».
El doctor Abreu Tejada apeló a la dirección nacional de INAPA para que se busque una salida urgente al problema.