Desde la madrugada del miércoles, lluvias continuas han impactado varias provincias del país, ocasionando la saturación del suelo y aumentando el riesgo de deslizamientos de tierra. El general Juan Manuel Méndez, director del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), ha urgido a la población a permanecer alerta y a reportar cualquier señal de peligro, como grietas en sus viviendas, a los organismos de socorro.
Según Méndez, las persistentes lluvias han dejado los suelos saturados, lo que podría desencadenar inundaciones y deslizamientos de tierra. Por su parte, Saddam Font Frías, predictor de la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet), ha indicado que una vaguada y un sistema de baja presión continuarán afectando el territorio, manteniendo un ambiente húmedo y nublado, especialmente al sur del país.
Los valores acumulados de lluvia hasta ayer oscilaban entre 50 y 90 milímetros, y se espera que en las próximas 24 horas aumenten a entre 75 y 125 milímetros. La Onamet advierte que las precipitaciones podrían intensificarse hacia el norte debido a la posible formación de una baja presión en esa región.
Ante este panorama, se ha elevado la alerta a 27 provincias, con 11 en alerta amarilla y 16 en verde. Las provincias en alerta amarilla incluyen Barahona, Pedernales, Independencia, San José de Ocoa, Peravia, Bahoruco, Azua, San Cristóbal, Santo Domingo, San Pedro de Macorís y el Distrito Nacional.
Las instituciones que conforman el COE se mantienen en reuniones permanentes para coordinar los planes de contingencia. Además, el Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (INAPA) reporta que 35 acueductos en varias provincias están afectados por las lluvias, lo que ha generado turbidez en el agua y ha perjudicado a más de 305,577 usuarios.
En Villa Altagracia, provincia San Cristóbal, se registró el colapso de varias paredes de una casa en construcción, dejando atrapadas a cinco personas que fueron rescatadas. Estos eventos subrayan la importancia de mantenerse alerta y tomar precauciones ante las condiciones climáticas adversas.