«Cinco Magistrados del Tribunal Constitucional culminarán sus labores en diciembre tras completar su mandato de doce años, incluyendo al presidente Milton Ray Guevara. Serán reemplazados por el Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) después de haber sido designados en diciembre de 2011. Esta primera matrícula del año permanece en el TC desde entonces. Para la selección de nuevos magistrados, el CNM seguirá un proceso de convocatoria, evaluación de candidatos y otros procedimientos estipulados constitucionalmente.
En diciembre, concluyen su período cinco jueces del Tribunal Constitucional, incluyendo al presidente Milton Ray Guevara, después de servir doce años. Rafael Díaz Filpo, Lino Vásquez Samuel, Víctor Joaquín Castellanos Pizano y Justo Pedro Castellanos Khoury completan la matrícula de magistrados que serán reemplazados por el Consejo Nacional de la Magistratura (CNM). Estos jueces fueron designados por el organismo el 21 de diciembre de 2011 y representan la última remesa que aún permanece en el TC de la primera matrícula escogida en ese año. Para el proceso de reemplazo, el CNM seguirá un riguroso proceso de convocatoria, evaluación de postulantes y otros procedimientos establecidos constitucionalmente.
La historia del Tribunal Constitucional de la República Dominicana comenzó con la Constitución del 26 de enero de 2010, que estableció su misión de garantizar la supremacía de la Constitución, defender el orden constitucional y proteger los derechos fundamentales. El TC está compuesto por trece miembros y es el órgano supremo de interpretación y control de la constitucionalidad. Las decisiones del Tribunal Constitucional son definitivas, irrevocables y constituyen precedentes vinculantes para los poderes públicos y todos los órganos del Estado. El TC es autónomo con relación a los demás poderes y órganos del Estado y posee autonomía administrativa y presupuestaria.
El proceso de selección de nuevos magistrados del Tribunal Constitucional está a cargo del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM), que incluye al presidente Luis Abinader y otros altos funcionarios del gobierno. Este órgano es el encargado de elegir a los nuevos magistrados que reemplazarán a los que culminan su mandato en diciembre. Este proceso implica la convocatoria pública, evaluación de los candidatos y otros procedimientos establecidos por la Constitución y la ley.
En términos de garantizar la ejecución de las sentencias, el Tribunal Constitucional es claro en afirmar que sus decisiones son de ejecución obligatoria y cualquier desacato a sus decisiones constituye una violación a la Constitución. Aseguran que cada una de sus sentencias será ejecutada, ya que constituyen precedentes vinculantes para todos los poderes y órganos del Estado. En resumen, el Tribunal Constitucional dominicano está comprometido con garantizar la aplicación de sus resoluciones y proteger la constitucionalidad del país.»