La campeona olímpica de natación, Ariarne Titmus, reveló condiciones de vida subóptimas en la Villa Olímpica de París durante los Juegos Olímpicos, destacando una realidad menos glamorosa de lo que muchos podrían esperar para un evento de tal magnitud. En una entrevista, la nadadora australiana describió espacios reducidos y problemas de higiene, como la falta de cambio de sábanas y escasez de papel higiénico, lo que llevó a los atletas a mentir sobre la cantidad de personas en sus habitaciones para obtener suficientes suministros.
Las críticas no se limitaron a las condiciones de vida, sino que también abarcaron la alimentación dentro de la Villa Olímpica. Otros atletas como el nadador italiano Thomas Ceccon y el británico Adam Peaty expresaron inconvenientes con el clima al interior de las instalaciones, la calidad de la comida, e incluso reportaron hallazgos desagradables como gusanos en los platos proporcionados. Estos testimonios resaltan desafíos significativos en la logística y gestión de los alojamientos y servicios alimenticios para los competidores, lo cual afectó la percepción general de la organización de los juegos en París.
-RT