Álex Cora reconoció que era difícil pensar si su equipo podría jugar mejor que los dos partidos más recientes en las principales fases del juego: Bateo, pitcheo y defensa.
Y el mánager aceptó que era difícil la pregunta, pero que estaban jugando buen béisbol en todos aspectos, incluyendo también el corrido de bases, la comunicación y todos los pequeños detalles que han resultado en dos triunfos categóricos sobre los Houston Astros.
Pero habrá que poner en evaluación también si se ha combinado con la peor exhibición de pitcheo de los Astros en buen tiempo, en particular el abridor, aunque el relevo tampoco se queda atrás en la Serie de Campeonato de la Liga Americana.
Boston Red Sox ganó 12-3 el tercer partido frente a su público, que presionó como pocas veces se ha visto al rival en cada jugada del partido. Los Red Sox triunfaron de una similar; abusando de los abridores y castigando a los relevistas que tuvieron enfrente.
«A la ofensiva, es lo mejor que hemos estado en toda la temporada», dijo Cora en conferencia de prensa. «Como he dicho antes, ahora mismo no se trata de conectar 30 jonrones y producir 100 carreras. Se trata de ganar cuatro partidos y los muchachos han hecho todo lo posible en la caja de bateo para hacerlo».
Cora tiene razón, pero al ritmo que van y si las series tuvieran más partido, habría que ver qué sucedería y hasta donde llegarían sus bateadores.
Esta noche, sacaron al abridor mexicano, José Urquidy con apenas una entrada y dos tercios de trabajo, en las que los Red Sox anotaron seis carreras, cinco limpias, protagonizadas por un grand slam de Kyle Schwarber, para sumar tres jonrones con la casa llena en los dos partidos más recientes; apenas el segundo equipo en hacerlo en toda la historia de las Grandes Ligas en postemporada.