Con un 92% en las valoraciones de Rotten Tomatoes, ‘Oppenheimer’ se sube al podio frente al 89% de ‘Barbie’.
Llevamos semanas hablando, y oyendo hablar, sobre este 20 de julio, la fecha en la que dos de las películas más esperadas del año llegarían finalmente a las salas de cine de todo el mundo. Después de las grandes expectativas de éxito que tanto ‘Barbie’ como ‘Oppenheimer’ han cosechado en los últimos meses, se han publicado de las primeras críticas profesionales de ambas películas.
Según las reacciones de los primeros afortunados que han podido ver las cintas, ¿cuál es «mejor»? ¿Cuál se lleva la palma y se coloca como la «mejor valorada»? Como podíamos imaginar, ambas se han dado un baño de alabanzas y han conseguido elevados resultados en Rotten Tomatoes. Sin embargo, una ha conseguido distanciarse ligeramente de la otra.
Las grandes previsiones en taquilla de ‘Barbie’, que se prepara para recaudar una cifra aproximada de 165 millones de dólares iniciales en la taquilla mundial estos días, no han logrado seducir a la crítica, que ha situado a ‘Oppenheimer’ un mínimo escalón por encima.
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UNIVERSAL
La historia de J. Robert Oppenheimer y su creación de la bomba atómica, narrada a través de la mirada de Christopher Nolan, ha recibido un 92% en Rotten Tomatoes, en el momento de escribir estas líneas. Por su parte, la cinta de Gerwig, protagonizada por Margot Robbie y Ryan Gosling, ha sumado un gran 89%, también en RT.
Pero, más allá de cifras y porcentajes, ¿qué han dicho los primeros medios sobre las películas?
‘Barbie’: primeras críticas
Según The Hollywood Reporter, «Gerwig se deleita con la riqueza y rareza de su material en esta inteligente parodia de las muñecas Barbie y su tenso legado. Es impresionante lo mucho que la directora, conocida por sus dramas astutos y narrativamente precisos, ha conseguido hacer caber en una película comercial. ‘Barbie’ está llena de bromas que se burlan de Mattel, ponen en ridículo la historia de las muñecas y hacen gestos sobre las contradicciones de nuestra sociedad sexista. […] A pesar de la inteligencia con la que Gerwig interpreta a Barbie, hay algo siniestro en todo el ejercicio. […] La política confusa y el aterrizaje emocional plano de ‘Barbie’ son signos de que la película sirve en última instancia a una marca».
En Los Angeles Times, se exponía lo siguiente: «‘Barbie’, de Greta Gerwig, una exuberante y a veces agotadoramente inteligente pieza de neorrealismo matteliano. […] Independientemente de lo que se piense de ‘Barbie’, la mera existencia de esta fantasía cómica inteligente, divertida, conceptualmente juguetona y deslumbrante habla del ingenio irreverente y la sensibilidad metacrítica de su directora. […] Gerwig ha concebido ‘Barbie’ como una emulsión de tontería y sofisticación, una película que promueve y deconstruye su propia marca. No solo pretende renovar el interminable debate «Barbie: ¿buena o mala?» Quiere representar ese debate, argumentar vigorosamente ambas posturas durante la mayor parte de dos trepidantes horas.»
Desde Vulture, alababan la interpretación de Robbie y Gosling como líderes del reparto, y comentaban: «Tiene aspectos que merecen la pena, como Robbie, que además de dar la talla, es tan capaz de una seriedad desgarradora como de hacer humor, y que a veces consigue ambas cosas a la vez sin esfuerzo. […] Gosling está a punto de robar la película como un Ken que carece de cualquier sentido fuera de su devoción por Barbie; es un himbo flojo cuya postura es un acto de comedia física. […] ‘Barbie tiene un punto defensivo, como si intentara anticiparse y reconocer cualquier crítica que se le haga antes de que se produzca, lo que la hace emocionalmente inerte a pesar de sus esfuerzos por ser desternillante. […] Pero el problema de intentar colar ideas subversivas en un proyecto tan intrínsecamente comprometido es que, en lugar de salirse con la suya, lo único que se consigue es crear una nueva forma de que una marca se venda a sí misma».
En BBC, añadían: «No se trata solo de una comedia de acción real genuinamente divertida y entrañable (de esas no hay muchas hoy en día), sino de un proyecto artístico tan audaz, inventivo y políticamente cargado que seguramente será nominado a todo tipo de premios. ¿Barbie nominada a la mejor película en los Oscar de 2024? Yo no apostaría en contra».
Según nuestra crítica de ‘Barbie’, «Gerwig utiliza el juego de hacer traspasar a Barbie el espejo siguiendo el conejo blanco para sacarla de Barbieland y llevarla a un mundo desconocido, el de los humanos. […] El rosa del que tanto se ha hablado durante meses en una de las campañas de promoción más rimbombantes en años, brilla gracias a la cámara de Rodrigo Prieto, director de fotografía habitual de Iñárritu y Scorsese. Nada decepciona en ese decorado ni ese vestuario. Tampoco en sus coreografías y canciones creadas por Mark Ronson, productor de Miley Cyrus, Lady Gaga o Dua Lipa. […] Con toda la carne puesta en el asador, se mueve cómodamente en un tono absolutamente cómico y en su espíritu reivindicativo consigue colar hasta un ‘Sí se puede’, en español incluso en la versión original.»
‘Oppenheimer’: primeras críticas
En este caso, The Hollywood Reporter expresaba: «‘Oppenheimer’, de Christopher Nolan, es un thriller inteligente y potente sobre el hombre que dirigió el Proyecto Manhattan para construir la bomba que puso fin a la Segunda Guerra Mundial. Para prescindir de las inevitables metáforas sobre las armas de destrucción masiva, es más lenta que explosiva. Pero quizá el elemento más sorprendente de esta audaz epopeya es que la lucha por el armamento atómico acaba siendo secundaria frente a la mordaz descripción del juego político, ya que una de las mentes científicas más brillantes del siglo XX es vilipendiada por expresar opiniones eruditas que van en contra del pensamiento de la carrera armamentística de Estados Unidos».
Por su parte, The New York Times comentaba: «Es una historia densa, llena de acontecimientos, a la que Nolan — que desde hace tiempo ha abrazado la plasticidad del medio cinematográfico — ha dotado de una estructura compleja, que se parcela en secciones reveladoras. […] El virtuosismo de la película es evidente en cada fotograma, pero se trata de un virtuosismo sin autobombo. Los grandes temas pueden convertir a los cineastas bienintencionados en fanfarrones, hasta el punto de eclipsar la historia a la que pretenden hacer justicia. Nolan evita esa trampa situando insistentemente a Oppenheimer en un contexto más amplio, sobre todo con las partes en blanco y negro».
En su crítica, The Daily Beast elevaba la figura del director y guionista: «‘Oppenheimer’ — una película de contrastes y contradicciones sin fin — es la expresión más plena del arte del guionista y director hasta la fecha. Impulsada por la inexorable marcha del progreso y la imaginación y electrizada por la terrible emoción de las teorías, los sueños y los milagros realizados en toda su devastadora gloria, es una epopeya dividida de asombro y horror, fisión y fusión. Es, al mismo tiempo, el retrato unificado de un hombre en conflicto y un logro singular para el actual autor de éxitos de taquilla de Hollywood. […] Hay una gran cantidad de riquezas para digerir, saborear y reflexionar en esta cinta, que aborda la emoción del descubrimiento científico, el miedo a inventar algo sobre lo que el inventor no tiene control y las alarmantes consecuencias de abrir un camino histórico, especialmente cuando conduce directamente a la Caja de Pandora».
Según nuestra crítica de ‘Oppenheimer’, «‘Oppenheimer’ es, al mismo tiempo, un biopic al uso sobre la figura protagonista, un thriller bélico contrarreloj, un drama judicial en forma de caza de brujas contra el fantasma comunista y un controvertido estudio sobre si el fin justifica los medios y la moral existencialista humana. […] Christopher Nolan pretende con ‘Oppenheimer’ subir un escalón más del Olimpo de Hollywood dejando de lado los artificios efectistas de guion con un «bombazo» que no deje lugar a dudas, tal y como intentan sus protagonistas. La cuestión es que muchos no verán a ‘Oppenheimer’ como un arma de destrucción masiva que bombardee sus sentidos, sino como fuegos artificiales: vistosos pero inofensivos.»
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