La posesión generalizada de armas de fuego sigue siendo un grave problema para Estados Unidos. Un nuevo reporte federal revela que el número de unidades producidas en el año 2020 representa un incremento del 187 % en comparación con el 2000.
El documento señala también que el robo es la principal manera de adquirir armas entre los delincuentes. Preocupa sobre todo la creciente tendencia de sustraer armas guardadas en vehículos, que se convierten en una presa fácil para los malhechores.
Cada 15 minutos en EE.UU. se produce el robo de un arma en un automóvil, según la alarmante estimación de la organización Everytown for Gun Safety. Según los datos que han recopilado, solo en 2020 se reportaron aproximadamente 77.000 robos de armas en 271 ciudades estadounidenses. Asimismo, del 2019 al 2020 la ocurrencia de estos crímenes creció en al menos 180 ciudades.
Según la organización, hace una década, la mayoría se robaban en viviendas, mientras que hoy en día los vehículos se han convertido en la principal fuente de armas para los criminales.
Uno de los factores de este cambio es el aumento generalizado de las compras de armas de fuego durante la pandemia. Por otro lado, el hecho de que el coronavirus hiciera que mucha gente estuviera en casa ha dificultado los robos en domicilios.
Solo quince estados del país requieren que los dueños de armas reporten estos incidentes, según Everytown for Gun Safety. Esto significa que la cantidad de armas robadas en todo EE.UU. probablemente sea mayor de lo estimado.
Además, los expertos recuerdan que la mayoría de estados no tienen leyes que especifiquen cómo se debe guardar un arma de fuego dentro de un automóvil desocupado. Tan solo Massachusetts y Oregón exigen que se almacenen en un lugar cerrado con llave o candado cuando no estén en uso, incluido en vehículos.
Mientras, en otros territorios se ha hecho más difícil combatir esta clase de robos. Así, el gobernador de Virginia Occidental aprobó un proyecto de ley que legaliza que los conductores puedan llevar armas cargadas en sus vehículos. Por otro lado, en febrero, un tribunal de Filadelfia invalidó una orden municipal que obligaba a los propietarios a informar a la Policía en caso de robo de su arma.
Esto se produce en un contexto en el que recientemente se supo que las muertes por violencia armada en EE.UU. alcanzaron en 2020 su número más alto en más de medio siglo tras experimentar un aumento del 34 %.