El detenido está implicado en varios casos de secuestros cometidos en la provincia de Barahona.
Agentes policiales, adscritos a la Oficina Central Nacional Santo Domingo OCN-INTERPOL de la Dirección Central de Investigaciones Criminales DICRIM, viajaron hacia la República de Colombia, donde recibieron en calidad de detenido y trajeron al país bajo custodia al líder de una peligrosa banda criminal que operaba en distintas partes del territorio nacional.
El detenido viajó hacia ese país suramericano el pasado 22 de diciembre, tratando de huir de la justicia dominicana.
Se trata de José Luis Alvarado apodado “Chelo Alcarrizos”, de 31 años, quien era requerido por las autoridades judiciales dominicanas, en virtud de la orden de arresto No.589-01-2022-AJ-04656, emitida el pasado 28 de noviembre.
El apresamiento fue gracias a una intensa labor de inteligencia, coordinación e intercambio de información con los homólogos de la OCN-Interpol Bogotá-Colombia, para que el prófugo no sea “admitido” en ese territorio y fuera retornado bajo custodia policial hacia la República Dominicana.
Tras agotar las coordinaciones correspondientes, el detenido fue finalmente trasladado a la sede del Palacio de la Policía Nacional, y más tarde enviado a la Subdirección Regional de Investigación, con asiento en Barahona, para ser presentado ante las autoridades judiciales correspondientes.
Imputaciones
De acuerdo al informe preliminar, José Luis Alvarado (a) Chelo Alcarrizos, junto a otros hombres ya identificados por la Policía, lidera una red organizada que se dedica al secuestro de empresarios y comerciantes en diferentes partes del país, con el fin de obtener dinero por su rescate.
La banda, según el reporte, ha estado operando en los últimos meses en la provincia de Barahona, donde se investigan varios hechos como el ocurrido el pasado 27 de noviembre, cuando el hoy detenido, junto al ya fallecido Bello Andino Angomas Méndez (a) El Menor, abordo de una Jeepeta y portando distintos tipos de armas de fuego, incluyendo un fusil, intentaron secuestrar al propietario de un negocio de repuestos de vehículos.
Este hecho fue impedido tanto por personas de la clase civil, como la rápida intervención de una patrulla de la Policía Nacional. De este modo, fue evitado el secuestro y posible muerte del comerciante. Oportunamente se ofrecerán mayores detalles del caso.