Zachary Horwitz, actor de películas de ciencia ficción y terror de bajo presupuesto, mejor conocido como Zach Avery, acordó declararse culpable de dirigir un enorme esquema de estafa piramidal en Hollywood.
El actor de 34 años admitió en documentos judiciales que engañó a los inversores en su esquema piramidal para que le dieran más de 650 millones de dólares por acuerdos ficticios de películas con HBO y Netflix.
Si bien Horwitz devolvió gran parte del dinero para atraer a las víctimas a invertir más, también gastó grandes sumas para financiar su “estilo de vida lujoso”, según quedó escrito en su acuerdo de declaración de culpabilidad del 1 de septiembre con la oficina del fiscal federal en Los Ángeles. Horwitz reconoció que no ha pagado 231 millones de dólares.
El acuerdo exige que Horwitz se declare culpable de un cargo de fraude de valores en una audiencia el 4 de octubre. Los fiscales indicaron en los registros judiciales que le pedirán al juez de distrito de los Estados Unidos Mark C. Scarsi que imponga una fuerte sentencia a la luz de la enorme suma que estafó. El actor ahora se enfrenta a una posible pena de hasta 20 años de prisión.
De acuerdo con la declaración de Horwitz, durante siete años representó falsamente a los inversionistas en tratos donde su compañía cinematográfica 1inMM Capital, LLC, supuestamente estaba comprando derechos de distribución de películas en el extranjero y luego otorgándoles licencias a Netflix, HBO u otras plataformas para transmitir en línea en América Latina, Australia, Europa y África.
Los inversionistas “prestarían” a 1inMM Capital de 35 mil a 1.5 millones de dólares por operación de película, y Horwitz garantizó que los reembolsaría dentro de un año con un rendimiento del 25% al 45%, aceptó el actor.
Pero Horwitz reconoció en el acuerdo que los contratos de distribución y licencia fueron falsificados. El esfuerzo por estafar a los inversores para que pensaran que eventualmente serían reembolsados incluyó mostrarles correspondencia falsa que afirmó haber intercambiado con ejecutivos de Netflix y HBO.
Más de 250 inversores fueron víctimas del plan de Horwitz. Entre ellos se encontraban varios de sus amigos más cercanos de la universidad, junto con sus padres, abuelos, hermanos y suegros, algunos de los cuales perdieron sus ahorros para la jubilación.
De acuerdo con el abogado de tres de las víctimas que eran amigos del actor, ellos están satisfechos de que Horwitz “sea responsabilizado por su fraude criminal”, y esperan que las autoridades federales pueda recuperar los activos del estafador para que las víctimas “puedan reconstruir sus vidas después del daño devastador que ha causado a tanta gente”.
Horwitz, quien creció en Florida e Indiana, se mudó a Los Ángeles en 2012. Se hizo amigo de dos hermanos que lo ayudaron a ingresar al negocio del cine: el productor Julio Hallivis y su hermano Diego, director y productor. Bajo el nombre de Zach Avery, Horwitz apareció en una serie de sus películas de gama baja, incluidas “Trespassers » y » The Devil Below “.
El esquema piramidal convirtió a Horwitz en un hombre rico. Viajó en un jet privado y compró una casa de Beverlywood por 5,7 millones de dólares con una sala de proyecciones, un gimnasio y una bodega de vino de 1.000 botellas.
Su estilo de vida incluía gastos regulares de asientos junto a la cancha en los juegos de los Lakers y una ves trató de darle una propina de 5 mil dólares a una mesera.