Florida podría tener muy pronto una nueva ley de protección animal. La líder de la minoría demócrata en el senado estatal, Lauren Book, presentó el proyecto SB 932 que establece reglas y penalidades para el tratamiento de los animales en el estado, especialmente los domésticos.
Según el proyecto de ley, los perros no podrán sacar ninguna parte de sus cuerpos por la ventana de un auto en movimiento, no podrán sentarse en la falda del conductor y no podrán ser transportados en motocicletas.
Si bien estas parecen reglas comunes, hay algunas que son más estrictas aún en el proyecto. Cualquier perro que se encuentre dentro de un automóvil debe viajar en una caja lo suficientemente grande como para que se pueda sentar, parar o mover, o llevar puesto un arnés que haga las veces de cinturón de seguridad para el animal. Además, según el proyecto de Brook, el animal debe ir supervisado por una persona que no sea el conductor, con lo que quedaría prohibido que una persona sola lleve a su perro en el auto.
Cuando los animales están en las viviendas, quedaría prohibido tenerlos atados para limitar su capacidad de movimiento, con excepción de los momentos en los que un veterinario los esté revisando o los estén bañando.
Quienes no cumplan estas reglas recibirían multas que contarían como infracciones no criminales, que si bien imponen una penalidad monetaria no ponen en riesgo la capacidad de seguir manejando para un conductor.
Pero la ley tiene otras partes que sí son más severas. El proyecto de ley haría ilegal quitarle las garras a los gatos, a menos que sea con un propósito terapéutico. Si el estado descubriera que un veterinarioestá realizando procedimientos para sacar las garras de un gato sin una necesidad médica, el profesional podría recibir una multa de 5 mil dólares y correría el riesgo de perder su licencia profesional.
El otro aspecto del proyecto de ley tiene que ver con el uso de animales para pruebas de productos cosméticos. El estado de la Florida lo prohibiría completamente, y en casos de indicación federal para hacerlo, el producto debe llevar una etiqueta grande que indique que se utilizaron animales en pruebas de dicho producto.
Por último, la ley propone crear una base de datos con los nombres de todas las personas que cometieron agresiones contra animales en el estado. La lista será récord público e incluirá la licencia de conducir de la persona y el número de seguro social. Después de la primera ofensa, la persona permanecerá en la lista por tres años, o cinco si se trata de una ofensa grave. Ante un segundo incidente, el nombre de la persona permanecerá en la lista por diez años. Quienes tengan su nombre en la lista no podrán tener animales en sus hogares, ni trabajar con animales.