Clara Arias, la abogada defensora del pastor Johan Manuel Castillo Ortega, acusado de abuso sexual contra menores de edad, afirmó la mañana de este viernes, que implicados en el caso han estado llamando a miembros de la iglesia que este presidia, con la finalidad de que también se querellen y alegan que sus hijas fueron violadas.
Además, calificó como “una cacería de brujas” el proceso que atraviesa Castillo Ortega, ya que afirma que conflicto se origino por una deuda económica que tiene el pastor con un miembro de la iglesia.
“Las denuncias dicen que las menores han sido violadas, pero los certificados dicen que están íntegras”, expresó la Clara Arias, quien continuó diciendo: “No es posible destruir la moral, el honor, la vida de un ser humano y quedar sin consecuencia”.
De acuerdo con el expediente del Ministerio Público, la madre de las víctimas interpuso una denuncia el pasado 4 de junio en contra de Castillo Ortega por violar a sus hijas durante varios años.
El caso se dio a conocer cuando una hermana de ella le confesó que el religioso había abusado de sus sobrinas y de una hija suya.
El documento de solicitud de medida de coerción señala como declaraciones de las menores, que el religioso, supuestamente, violó a la mayor en varias ocasiones cuando tenía entre 11 y 13 años.
Y que toqueteaba a la menor y la obligaba a sobarle su parte íntima desde que tenía 10, incluso señaló que estas acciones las hacía con otras niñas.
El organismo persecutor señala que el lugar utilizado por el religioso para cometer el abuso sexual era el sótano de la iglesia, mientras la feligresía se encontraba en el primer piso