Aunque el COVID-19 no ha azotado con tanta fuerza en Venezuela a diferencia de otros países sudamericanos el presidente Nicolás Maduro dijo el miércoles que le preocupa un repunte de los casos, entre los que se incluyen a la vicepresidenta Delcy Rodríguez.
“Deben cuidarse, el coronavirus no ha desaparecido”, dijo Maduro en un acto de gobierno televisado, destacando que, aunque Venezuela tiene niveles bajos en comparación otros países, el crecimiento es notable. La cifra de contagios subió de uno por cada 100,000 habitantes hace un mes a cinco por 100,000 la semana pasada, resaltó el gobernante.
Maduro comentó que el incremento de los contagios también se evidencia en el contagio de varios de sus más cercanos colaboradores, entre ellos, la vicepresidenta y su hermano, Jorge Rodríguez, presidente de la Asambleas Nacional, de mayoría oficialista, así como los gobernadores oficialistas de los estados Carabobo y Falcón, Rafael Lacava y Víctor Clark.
El número de contagios se ha incrementado tras meses de relajación en las medidas de protección. Actualmente se mantiene el uso de mascarillas en sitios cerrados, transporte público y espectáculos masivos.
Hasta el miércoles se registraron en el país 530,975 casos positivos, 98% de ellos recuperados, además de 5,750 fallecidos. La cifra de contagios, sin embargo, podría ser mayor, puesto que la mayoría de los contagiados se atiende en casa y por lo general no se suman a las estadísticas oficiales.