A falta de hoteles, Brasil ofrecerá cruceros como hospedaje en la COP30

El Gobierno de Brasil concluyó este miércoles la contratación de dos cruceros para alojar a los participantes de la Conferencia sobre el Cambio Climático de la ONU (COP30), debido a la limitada capacidad hotelera de la ciudad amazónica de Belém.

Con esta medida, junto a otras opciones de hospedaje, los organizadores aseguran que habrá alojamiento suficiente para «todas» las delegaciones oficiales durante las dos semanas del evento, donde se esperan entre 40,000 y 50,000 personas.

Los barcos contratados, el MSC Seaview y el Costa Diadema, ofrecerán en conjunto 6,000 camas, que serán gestionadas inicialmente por la ONU y ofrecidas prioritariamente a delegaciones de 98 países insulares o en vías de desarrollo. Estos pagarán US$ 220 por noche, mientras que el resto de países podrá reservar posteriormente, a un costo de US$ 600 diarios.

Ambos cruceros, que normalmente realizan viajes turísticos por Brasil, Uruguay y Argentina, estarán atracados en un puerto fluvial a unos 30 minutos del centro de convenciones donde se celebrará la COP30.

Las camas en los cruceros complementarán la oferta de hoteles existentes o en construcción, así como apartamentos en alquiler temporal. A pesar de ello, delegaciones extranjeras han expresado preocupación por la escasez y el alto costo de alojamiento en Belém, una ciudad no acostumbrada a eventos de tal magnitud.

Richard Stanslaus Muyungi, negociador de Tanzania, declaró al diario Folha de São Paulo que el tema del hospedaje era una «gran preocupación» y que incluso envió una carta a los organizadores.

No obstante, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva ha rechazado cualquier cambio de sede y reafirmó su compromiso con Belém, resaltando su importancia simbólica por estar en pleno corazón de la Amazonía.