Fantástico el partido que se vivió anoche en territorio angelino. Unos Lakers muy mejorados recibían a su rival por excelencia, los Celtics, quienes además llegaban con el mejor balance de la NBA. ¿Cómo salió la cosa? Pues nos quedó una espectacular noche de baloncesto con exhibiciones como los 44 puntos de Jayson Tatum o los 37 de Anthony Davis, y en la que todo se acabó decidiendo en la prórroga. Poco más se puede pedir.
Sin duda fue un encuentro de enormes contrastes. Por un lado Boston salió mucho mejor y en poco tiempo construyó una notable ventaja que a poco de concluir el tercer periodo aún alcanzaba los 14 puntos. Fue ahí cuando todo cambió. Unos asentados Celtics vieron como los de oro y púrpura daban la vuelta al choque por completo con un tremendo parcial de 18-0. Les costó reponerse; tanto es así que los chicos de Darvin Ham parecían tener cerrado el partido a poco más de cuatro minutos para el final al gozar de una renta de 13 puntos. Pocos esperaban que desde ese momento encajarían un parcial de 17-3 (con canasta final de Tatum) que les llevaría a tener que disputar un tiempo extra. Ahí, en el añadido, los verdes resolvieron para llevarte el triunfo por 118-122.
El choque tuvo emoción y momentos brillantes de cada uno de los equipos, los cuales estuvieron acompañados por fantásticas actuaciones individuales. Jayson Tatum, a quien no pocos señalan como el que sería actualmente MVP de la temporada, logró esos mencionados 44 puntos con un 15 de 29 en tiros de campo. Además, logró nueve rebotes y repartió seis asistencias. Así se las gasta la estrella de los de Massachusetts.
Tatum estuvo impresionante, pero sin duda contó con ayuda para batir a los Lakers, sobre todo en unos últimos minutos y prórroga en los que estuvieron realmente bien Marcus Smart y Jaylen Brown. El primero completó su hoja estadística con 18 puntos, mientras que el segundo consiguió un doble-doble de 25 puntos y 15 rebotes.