Ya hemos visto en otras ocasiones que los fabricantes de vehículos eléctricos están viendo “su agosto” con las posibles suscripciones mensuales o anuales a cambio de nuevas funciones para los coches. Desde Tesla a BMW, quienes empezaron a cobrar una suscripción mensual por asientos de calefacción, y ahora Mercedes ha ido un poco más lejos.
Y es que, la casa alemana propone a sus clientes de los próximos eléctricos que si quieren llegar a la máxima aceleración, paguen un dinero anual, de lo contrario, un muro de pago evitará que puedan “correr” más.
Tal y como ha explicado Mercedes, han introducido una suscripción de “Aumento de aceleración” de $ 1.200 por año que mejora el rendimiento del EQE y EQS en sus variantes sedán y SUV estándar. Dicho de otra forma, pagas la tarifa anual y tu tiempo de 0-60 MPH mejorará entre 0,8 y 1 segundo gracias a una mayor potencia máxima del motor y un mayor par.
El fabricante recalca que se trata estrictamente de un cambio de software. Pero estás pagando para obtener el rendimiento que tu automóvil ya podría tener de fábrica, un movimiento extraño cuando estamos hablando de autos que ya son bastante costosos y que tienen modelos más rápidos que solo requieren un desembolso único. Por tanto, ¿para qué comprar un EQS 450 con el complemento de aceleración cuando un EQS 580 será más rápido e incluirá más comodidades en el trato?
Sea como fuere, y como decíamos al comienzo, no son los primeros en llevar a cabo este tipo de movimientos. Tesla ha estado pidiendo a los clientes que paguen por sus asistencias al conductor más avanzadas. Incluso cobró a los compradores del Model S de entrada una prima para desbloquear la capacidad de la batería.
Dicho todo esto, parece claro que el sector no va a modificar este tipo de conductas, y es de esperar que el ecosistema sea más grande con el paso del tiempo. Al igual que con el cambio general del mundo de la tecnología hacia los servicios de suscripción, Mercedes espera un flujo constante de ingresos de los clientes que, de otro modo, gastarían poco más allá de la compra inicial.
Si alguien te dijera hace 10 años que el fabricante de tu coche te iba a pedir una suscripción por obtener la máxima aceleración, probablemente te hubieras reído. Desgraciadamente, no creemos que sea la última apuesta de un sector que busca obtener más beneficios.