Las autoridades rumanas han detenido a ocho militares rumanos por su presunta participación en el robo de más de 7 millones de toneladas de combustible de la base militar de la OTAN Mihail Kogalniceanu, que alberga a la mayoría de los miles de soldados estadounidenses desplegados en Rumanía.
Según el medio local de la provincia de Constanza Replica Online, que ha sido el primero en revelar la operación citando fuentes oficiales, la Policía ha efectuado redadas en varios puntos de esa región costera del Mar Negro e investiga a un total de 22 militares por su supuesta responsabilidad en el robo.
Situada cerca de la orilla del Mar Negro, a escasos 500 kilómetros en línea recta de la península ucraniana de Crimea ocupada por Rusia, la base de Mihail Kogalniceanu es uno de los pilares de la arquitectura de seguridad de la OTAN en el sureste de Europa.
En noviembre del año pasado, las autoridades rumanas desarticularon una red criminal que había robado durante más de cuatro años combustible de las tropas estadounidenses por un valor estimado de 2 millones de dólares.
Las siete personas detenidas entonces trabajaban en una empresa de generadores eléctricos que operaba en esa base.
Según las pesquisas, en vez de utilizar toda la gasolina que ellos mismos introducían en la base con camiones cisterna, estos ladrones dejaban sin descargar combustible que luego se quedaban y vendían.
EFE