El papa viajará a Baréin para intensificar las relaciones con el islam

El papa viajará del 3 al 6 de noviembre a Baréin «para intensificar las relaciones con el islam», según explicó hoy el portavoz del Vaticano, Matteo Bruni, aunque la visita estará marcada por las peticiones de opositores y organizaciones para que inste al respeto a las libertades de religión y de expresión en el país.

Se trata del 39 viaje internacional de Francisco y su 58 país visitado, además de ser la primera vez que un pontífice visita Baréin, en «una nueva etapa en el camino de la fraternidad y comprensión» después de su viaje a Abu Dabi en 2019, cuando se firmó el documento de la «Fraternidad Humana» con el jeque egipcio Ahmad al Tayyeb, gran imán de Al Azhar, la mayor institución suní.

«El llamamiento al dialogo», sobre todo entre religiones, se repetirá en los discursos del papa, sobre todo en estos momentos de guerra, según el portavoz vaticano.

El viaje estará muy marcado por los llamamientos de los opositores, como el partido chií Al Wefaq, disuelto en 2016, que han pedido al papa que urja a un «diálogo nacional serio» y a la puesta en libertad de los opositores políticos y a los religiosos chiíes encarcelados.

Aunque la mayoría de población es chií, el país está gobernado por una monarquía suní, «que persigue y limita sus libertades», denuncian.

Esa petición también ha llegado desde otras organizaciones, como Amnistía Internacional de Italia, que ha reclamado al papa «que encienda un faro sobre las violaciones de derechos humanos en el país y pida la liberación inmediata de los presos políticos y el fin de toda discriminación contra la comunidad chií por parte de las autoridades de Baréin».

Ante estos llamamientos, el portavoz vaticano dijo que habrá que escuchar a Francisco durante el viaje y recordó que «es bien sabida la posición del papa y de la Santa Sede en materia de libertades y de diálogo».

También adelantó que Francisco puede hablar de la precariedad de la vida de los migrantes y de los trabajadores en ese país, que recibe sobre todo migración dedicada a la mano de obra.

El viaje a Baréin comenzará con la visita de cortesía al rey Hamad bin Isa Al Jalifa, que le invitó a visitar su país y, luego pronunciará su primer discurso ante las autoridades en el palacio real Sakhir.

El día siguiente, Francisco clausurará el «Foro para el Diálogo: Oriente y Occidente para la Convivencia humana», y por la tarde se reunirá con Al-Tayyeb, con quien ha coincidido en varias ocasiones, la última en su pasado viaje en Kazajistán.

El foro es una de las iniciativas con las que Baréin muestra su compromiso con la convivencia de todas las religiones, pues el país ya acogió las iniciativas del Diálogo entre civilizaciones en 2002 y 2014, explican los organizadores.

Posteriormente se encontrará con los miembros del Consejo Musulmán de Ancianos en la mezquita del palacio real de Sakhir y después se trasladará para una oración por la paz en la Catedral Nuestra Señora de Arabia, inaugurada el 10 de diciembre de 2021, con capacidad para 2.300 personas y construida a 20 kilómetros de la capital de Baréin, en Awali, en los terrenos que donó el monarca.

El sábado, presidirá la misa ante 20.000 personas en el estadio nacional de Baréin para los católicos del país (cerca de 80.000) y que son sobre todo inmigrantes procedentes de Sri Lanka, India, Líbano, Filipinas y varios países occidentales, y por la tarde se reunirá con cerca de 800 jóvenes.

El último día, el papa tendrá su habitual encuentro durante los viajes Apostólicos con los obispos, sacerdotes, consagrados, seminaristas y agentes de pastoral, esta vez en la Iglesia del Sagrado Corazón en la capital.

EFE