La convulsa crisis política y económica que vive Haití tendría un nuevo episodio de violencia este lunes, cuando se tienen previstas nuevas protestas en medio del anuncio de aumentos de precios en los combustibles, publican medios de prensa.
El sábado, agencias de noticias se hicieron eco de la decisión de Naciones Unidas (ONU) de ordenar la evacuación de todos sus trabajadores no esenciales en Haití a causa del incremento de la violencia por las continuas manifestaciones en las calles del país.
El organismo alega que el personal de la ONU es vulnerable a secuestros y a posibles ataques. Esta decisión precede a la condena que hicieran a la violencia que sufre el país caribeño.
“La ONU en Haití condena la violencia de la que ha sido testigo el país en las últimas semanas y pide a todos los actores que trabajen juntos para calmar la situación y garantizar el retorno a la calma”, dice una publicación a la agencia Efe en la que cita un comunicado del organismo.
El nuevo elemento de las protestas que se vienen escenificando desde hace meses en Haití fue el anuncio que el pasado 12 de septiembre hizo el primer ministro haitiano, Ariel Henry, de aumentar el precio de los combustibles pese a la escasez del carburante que existe en el vecino país.
Tras el anuncio, se han intensificado las manifestaciones en las calles, que dejan ya varias personas muertas. Apenas el viernes, el periódico haitiano Le Nouvelliste informó de un muerto y más de una decena de heridos debido a las protestas en varios barrios de la capital haitiana que movilizaron a miles de personas.
En medio de la indignación popular, las bandas armadas siguen su golpe contra el país. A principios de la semana pasada, uno de esos grupos armados pidió el cierre de la terminal de combustible Varreux, la que se estima que almacena el 70% de los productos derivados del petróleo de Haití. “Ustedes entrarán a esta terminal cuando estemos muertos”, decía uno de ellos en un video que fue compartido en redes sociales y republicado en medios de prensa haitianos.
Mientras, la Asociación de Profesionales del Petróleo (APPE) pidió al Gobierno hacer accesible la terminal de Varreux, cuyas existencias tendría “cantidad suficiente para abastecer a todas las estaciones de servicio antes de poder reabrirlas con los nuevos precios, a fin de evitar que sean asaltada y/o destruida”.
Así lo indican en una carta del presidente de la APPE, Randolph Rameau, al ministro de Economía y Finanzas, Michel Patrick Boisvert, del 22 de septiembre y de la que se hace eco Le Nouvelliste.