El calor extremo que viven actualmente muchas partes del mundo también revela sorpresas del pasado. Esto mismo fue lo que ocurrió cerca del pueblo de Borgo Virgilio, en el norte de Italia, en los alrededores de la ciudad de Mantua. Allí, los niveles de agua en el río Po han disminuido tanto que han terminado por mostrar una sorpresa del pasado.
Cuentan los medios italianos que el río Po, que se extiende de este a oeste por el norte de Italia y es el río más largo del país, ha sufrido como muchas partes de Europa de asfixiantes olas de calor que han disminuido sus niveles. Así ha terminado por aparecer una bomba intacta de la Segunda Guerra Mundial que según los expertos militares pesaba alrededor de 450 kilos.
Nada más conocerse la noticia, las autoridades ordenaron desalojar la zona, evacuando a los aproximadamente 3.000 civiles que viven en las inmediaciones. Luego, los expertos militares cortaron la mecha de la bomba y trasladaron el dispositivo a una cantera a unos 45 kilómetros de distancia. Una vez allí, los especialistas llevaron a cabo una detonación controlada en la que no se reportaron heridos ni daños por la explosión.
WW2 bomb revealed in drought-hit waters of Italy’s River Po https://t.co/XxYLkF6M6q pic.twitter.com/SiNbGGCtQG
— Reuters (@Reuters) August 7, 2022
En este caso, el calor extremo ha sido actor secundario de lo ocurrido, un verano que según los expertos irá aumentando las temperaturas medias a lo largo de las próximas décadas. A finales de junio, Roma reportó su temperatura más alta jamás registrada, 40,5 grados Celsius, cifra casi calcada que la ocurrida en Reino Unido en el mes de julio, marcando también un récord histórico.
Por cierto, durante la ola de calor de junio, el río Tíber de Roma se secó tanto que las ruinas de un antiguo puente construido durante el reinado del emperador Nerón (quien gobernó como el quinto emperador del 54 al 68 d. C.) también se hicieron visibles en el fondo del río.