Juan Guaidó aterriza en Venezuela en medio de un clima de tensión política | Internacional

Juan Guaidó llega a Caracas el martes en medio de una gran tensión. En video, Guaidó después de su aterrizaje en Caracas.



Juan guaidó, líder de la oposición y reconocido como presidente interino de Venezuela Para más de cincuenta países, aterrizó el martes en Caracas a las 5 p.m. hora local (10 p.m.en España peninsular) en medio de golpes, golpes e insultos entre los seguidores y simpatizantes del líder chavista, Nicolás Maduro, que no tuvo mayores consecuencias.

Guaidó pidió revivir las protestas contra el régimen de Maduro después de una gira por Europa, Canadá y Estados Unidos que culminó con un impulso de la Casa Blanca. “Venezuela: ya estamos en Caracas. Traigo el compromiso del mundo libre, dispuesto a ayudarnos a recuperar la democracia y la libertad ”, tuiteó a su llegada.

Maduro, quien recientemente se reunió con el canciller ruso Sergey Lavrov, se lanzó a la ofensiva con una operación policial en las cercanías del Aeropuerto Internacional de Maiquetía, sujeto a las sanciones económicas de Washington contra la aerolínea estatal Conviasa. Algunos trabajadores de esta empresa recibieron a Guaidó con gritos de "fascista" o "asesino" en el área donde varios legisladores y diplomáticos lo esperaban.

La gira de Guaidó ha sido interpretada como una inyección de credibilidad para su proyecto, después de recibir el apoyo de sus aliados en el extranjero y después del fracaso de su intento de sacar a Maduro del poder. La oposición espera que este apoyo de la comunidad internacional se refleje ahora en Venezuela y que se reanude el ritmo de las protestas contra el régimen bolivariano.

Guaidó, quien viajó a Caracas en un avión de la aerolínea portuguesa TAP, desafió una vez más a Maduro después de ignorar las restricciones que le impidieron abandonar el país en enero. Una delegación de diputados de la oposición anunció que suspendería la sesión de la Asamblea Nacional para mudarse a Maiquetía, a 40 minutos del centro de Caracas, y su equipo de prensa advirtió de su llegada.

La anticipación con la que se hizo el anuncio del regreso funcionó como una espada de doble filo. El régimen chavista respondió con la captura del aeropuerto y el despliegue de policías y agentes de la Guardia Nacional Bolivariana desde la una de la tarde. También hubo gestos simbólicos, como la instalación por parte de los responsables del aeródromo de telas tricolores y banderas venezolanas en apoyo de Maduro.

Tensión

La operación policial generó tensiones y desórdenes. En medio de los enfrentamientos, el diputado opositor Deyalitza Aray fue arrestado. Varios periodistas también fueron hostigados y agredidos y se restringió el acceso de informantes a las inmediaciones de la terminal.

La escalada de tensiones también ha estado marcada por un fondo de mensajes y simbolismos bélicos. Durante un par de días, el régimen de Maduro había ordenado el traslado a Caracas de equipos militares de alto calibre desde varias partes del interior del país. Entre el arsenal hay una serie de misiles tierra-aire, que se vieron en las carreteras que rodean la capital y finalmente se exhibieron en la base militar de La Carlota, adyacente al Comando de Aviación General. Esta maniobra se completó después de que Maduro ordenó a las Fuerzas Armadas llevar a cabo ejercicios militares en varias regiones del país.