El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Colombia entregó este jueves las credenciales de presidente electo a Gustavo Petro y a su vicepresidenta, Francia Márquez, ganadores de la segunda vuelta electoral del pasado domingo, quienes aseguraron que «comienza la era del cambio».
Los magistrados del CNE, junto al registrador nacional, Alexander Vega, lideraron el acto protocolario para leer la resolución 3235 del 23 de junio de 2022, por medio del cual se declara la elección del presidente y vicepresidente para el periodo 2022-2026.
Vega indicó que 21.897.414 colombianos votaron en la segunda vuelta de las presidenciales y que Petro fue elegido con 11.292.758 votos (50,44%).
El presidente del CNE, César Abreo, indicó que «el acto de la democracia colombiana que hoy ponemos nuevamente en escena tiene una tradición muy larga» celebrado a pesar de que las autoridades electorales han sorteado «muchas dificultades». «Sin embargo, de todas hemos aprendido», agregó.
«Tenemos un pueblo que acaba de pronunciar su veredicto, y hoy ante la población ciudadana refrendamos la voluntad popular», detalló, y aseguró entregar las credenciales «con la seguridad de estar ante los dos principales responsables del destino de nuestro país en una nueva etapa histórica nacida de los cambios empezados hace muchas generaciones».
Bailando unos segundos al ritmo de sonidos del Pacífico, Francia Márquez recibió primero la credencial como vicepresidenta de Colombia de manos de la magistrada Doris Ruth Méndez Cubillos, única mujer del CNE, quien consideró un «honor inmenso» entregar el documento «a la primera mujer afrodescendiente en ocupar el cargo».
Luego fue el turno de Petro, a quien se la entregó el magistrado Luis Guillermo Pérez entre gritos del público de «sí se pudo». Pérez mencionó al universitario Lucas Villa, asesinado en la ciudad de Pereira durante las protestas de 2021, y citó sus palabras: «Ojalá el espíritu nos acompañe para que podamos sobrevivir para crear un mundo nuevo».
«Francia Márquez, eres una sobrevivient; Petro es un sobreviviente; la comunidad defensora de DDHH somos sobrevivientes» y «están tremendamente vivos está esta tarde en la entrega de esta credencial (…) los millares de hombres y mujeres que fueron sacrificados porque querían un país mejor y lucharon por las libertades, la democracia, la paz y por defender la madre tierra», añadió Pérez.
«Merecemos vivir sabroso, vivir con dignidad, con derechos, con justicia social y merecemos vivir cuidando la casa grande», manifestó Márquez tras recibir la credencial como vicepresidenta, en un «momento que para el pueblo negro es un acto de justicia racial y que para las mujeres es un momento de justicia de género».
«Honremos la memoria de todos los jóvenes y líderes que ya no están pero que cayeron por este momento», pidió, para agregar que solo quiere «contribuir trabajando arduamente porque nunca más una persona en este país vuelva a decir que no se puede, que no es capaz».
Petro, por su parte, insistió en la idea de un «gran acuerdo nacional», para lo que informó que ha invitado «simbólicamente» a su rival en las urnas, Rodolfo Hernández, y al expresidente Álvaro Uribe, de quien ha sido el principal opositor, para hablar «sobre temas del país».
«Lo que queremos en realidad es que millones de colombianos se pongan en modo diálogo, pero que sea vinculante, no solamente para hablar, sino para tomar decisiones (…) para llegar a acuerdos», para «construir los caminos de la transformación, no para seguir como estamos», manifestó.
«Comienza la era del cambio en Colombia», concluyó el presidente electo de Colombia, que asumirá el cargo el próximo 7 de agosto en sustitución del actual mandatario, Iván Duque.