Suele ser más frecuente en las mujeres, con edades comprendidas entre los 30 y 50 años de edad.
Cada 5 de mayo se celebra el Día Mundial de la Hipertensión Pulmonar, con la finalidad de concienciar a la población acerca de esta patología progresiva e incurable, que afecta a más de 25 millones de personas en todo el mundo.
Esta patología genera un incremento anormal de la presión de las arterias pulmonares, produciendo una disfunción del ventrículo derecho. Esto es debido a los cambios en las células que cubren las arterias pulmonares, formando tejidos que pueden bloquear o reducir el flujo sanguíneo.
A pesar de ser incurable, la Hipertensión Pulmonar es tratable si se detecta a tiempo y se administra el tratamiento respectivo.
Algunos de los síntomas característicos de esta patología son los siguientes, los cuales deben ser verificados por un especialista, mediante evaluación médica:
- Dificultad para respirar.
- Dolor o presión en el pecho.
- Aceleración en la frecuencia cardíaca.
- Fatiga.
- Cansancio.
- Mareos.
- Desmayos.
- Cianosis o coloración azul en labios y piel.
- Inflamación en tobillos y piernas.
La Hipertensión Pulmonar puede generar las siguientes complicaciones:
- Sangrado.
- Arritmias.
- Insuficiencia cardíaca, debido al agrandamiento del lado derecho del corazón.
- Coágulos sanguíneos.
¿Cómo podemos prevenir la Hipertensión Pulmonar?
A continuación mencionamos algunas recomendaciones que pueden ayudar a prevenir los factores de riesgo de esta enfermedad:
- Mantener una dieta alimenticia balanceada.
- Evitar el sobrepeso.
- Hacer actividad física (ejercicios).
- Si existen antecedentes familiares sobre esta enfermedad, acudir a un médico especialista.
- Evitar el consumo de sustancias estupefacientes.
- Evitar la ingesta de medicamentos inhibidores del apetito.