La gala de los premios Grammy comenzó este domingo en Las Vegas con mucho humor, actuaciones vibrantes y varios premios para los grandes favoritos de la noche, el jazzista Jon Batiste y la sensación del pop Olivia Rodrigo.
Batiste comenzó la tarde llevándose cuatro gramófonos en la antesala de los premios, ceremonia conocida como la “Premiere”.
El carismático jazzista de 35 años que conquistó once nominaciones, el mayor número de esta edición, con su animado “We Are”, venció en categorías como mejor video musical y mejor canción con raíces estadounidenses, y aún pelea por la mejor grabación y álbum del año.
El jazzista ya fue galardonado con un Óscar por su participación en la banda sonora de “Soul” (Pixar), fue director musical del famoso programa de entrevistas de Stephen Colbert, es hijo de una familia prominente de la industria de la música en Nueva Orleans y defiende causas sociales.
La sensación del pop Olivia Rodrigo, de 19 años, se coronó con el Grammy a mejor artista nuevo, derrotando fuertes rivales como Finneas, hermano de Billie Eilish, y Saweetie.
“Mi mayor sueño se volvió realidad”, dijo una emocionada Rodrigo al recibir su gramófono. La joven interpretó su sencillo “drivers license”, pero el tema, un gran éxito comercial, no logró hacerse con el Grammy a la canción del año, que fue para Sonic Silk, el proyecto de Bruno Mars y Anderson .Paak, con “Leave the Door Open”.
La ceremonia llega una semana después de que el actor Will Smith dejara atónitos a millones de espectadores tras abofetear a su colega Chris Rock en la premiación de los Óscar en Hollywood.
El incidente que impactó a la industria y opacó la mayor noche del cine no pasó por alto en la 64ª edición de los premios Grammy. El comediante Trevor Noah abrió la gala haciendo una indirecta alusión a la bofetada de Smith.
“Vamos a mantener los nombres de las personas fuera de nuestras bocas”, dijo refiriéndose a los gritos que el actor profirió en Los Ángeles después de atacar a Rock.
Cargada de humor, la fastuosa gala también desplegó una constelación de estrellas en el escenario.
Sonic Silk, el colombiano J Balvin y la argentina María Bizerra, Olivia Rodrigo y el provocador rapero Lil Nas X estuvieron entre los primeros en brindar deslumbrantes performances.
La superestrella Billie Eilish cantó una explosiva versión de su sencillo “Happier Than Ever”. Vistiendo una camiseta con el rostro de Taylor Hawkins, la artista le rindió homenaje al recientemente fallecido baterista de Foo Fighters.
La banda, fundada por Dave Grohl, y que canceló sus actividades debido a la repentina muerte de Hawkins de 50 años la semana pasada en Colombia, se llevó tres gramófonos en la antesala de los Grammy.
En las categorías latinas, se impusieron el puertorriqueño Bad Bunny, el colombiano Juanes y el cubano-canadiense Álex Cuba.
Alex Cuba, de 48 años, se alzó con el gramófono al mejor álbum pop latino con “Mendó”, una producción que mezcla diversos ritmos y para la que el músico trabajó con estrellas como Lila Downs y Antonio Carmona.
Ganador del Grammy Latino al mejor artista en 2010, Cuba derrotó a estrellas como Camilo y Selena Gómez.
El Grammy al mejor álbum de música urbana fue para “El Último Tour del Mundo”, del reggaetonero Bad Bunny, en tanto que Juanes, con “Origen” venció en la categoría de mejor álbum de rock latino o alternativo, dejando entre otros al español C Tangana y la argentina Nathy Peluso en el camino. Rubén Blades se alzó con el premio a mejor álbum tropical latino.
Otro trabajo ganador fue el exitoso “Love for Sale” del dúo de Lady Gaga, de 36 años, y el legendario cantante estadounidense Tony Bennett, de 95, que se hizo con dos gramófonos, mientras que el expresidente Barack Obama perdió su nominación en la categoría a mejor álbum narrado.
Los organizadores incluyeron en la antesala un mensaje sobre Ucrania para concienciar sobre los horrores de la guerra y el poder de la música.
Los surcoreanos BTS, el fenómeno global del K-pop, emocionaron a la audiencia con una potente performance de su sencillo “Butter”, que cuenta con una nominación esta noche.
El rapero Kanye West, con cinco nominaciones, no acudió este domingo al MGM Grand Garden Arena de Las Vegas, presencia que generaba expectativas debido a los comentarios críticos que Trevor Noah había realizado recientemente sobre la forma en que West estaba manejando públicamente su separación de su exesposa Kim Kardashian.
La cantautora estadounidense Joni Mitchell, que fue homenajeada en un evento premio el viernes, recibió un premio al mejor álbum histórico.