La diputada de Fuerza del Pueblo, Juliana O’Neal, calificó el presunto desfalco millonario en el Seguro Nacional de Salud (SeNaSa) como “uno de los golpes más dolorosos que ha sufrido el sistema sanitario dominicano”, al asegurar que los recursos desviados representaban tratamientos vitales para miles de personas en condiciones de vulnerabilidad.
Según expresó, lo ocurrido en SeNaSa va mucho más allá de un daño financiero. “Lo que desapareció no fueron números. Se perdieron quimioterapias, diálisis, estudios médicos, suplementos nutricionales, cirugías y medicamentos que eran esenciales para la vida de muchos dominicanos”, afirmó la legisladora.
O’Neal recordó que el régimen subsidiado que administra SeNaSa cobija a millones de usuarios de escasos recursos, para quienes la cobertura estatal es la única vía para enfrentar enfermedades graves como cáncer, insuficiencia renal o afecciones cardiovasculares.
“Cuando se manipulan fondos de salud, no se perjudica a una entidad: se hiere directamente a familias que batallan cada día contra diagnósticos severos”, agregó.
La diputada reiteró que desde el Congreso ha denunciado constantes fallas en la entrega de medicamentos para pacientes oncológicos, retrasos en autorizaciones, falta de abastecimiento y demoras en estudios especializados.
“Durante años he visto cómo los tratamientos de muchos pacientes se detienen porque no hay medicamentos o porque deben esperar meses por una autorización. Hoy entendemos que, mientras ellos sufrían esas carencias, millones eran desviados en esquemas irregulares”, denunció.
O’Neal insistió en que este caso debe convertirse en un punto de inflexión sobre la manera en que se manejan los recursos de salud.
“Cada peso que faltó pudo ser una quimioterapia suspendida, una radioterapia postergada o una cirugía que nunca se realizó. La corrupción en salud no es administrativa: es profundamente inhumana”, subrayó.
Pidió que la investigación avance sin privilegios ni consideraciones políticas y que se fortalezcan los mecanismos de control en áreas críticas como nutrición clínica, alto costo, servicios especializados y procesos tercerizados.
“El dinero destinado a la salud es sagrado. Si falló SeNaSa, falló el Estado. Y cuando el Estado falla, todos quedamos desprotegidos”, expresó.
Finalmente, la diputada destacó que este escándalo impacta directamente a miles de dominicanos que dependen de tratamientos continuos para mantenerse con vida.
“Quienes hemos sido pacientes o hemos visto a un ser querido luchar por su salud sabemos lo que significa cada medicamento, cada estudio y cada peso. Mi lucha siempre será por ellos, por quienes dependen de un sistema transparente para tener una oportunidad real de vivir”, concluyó.