Al menos diez personas murieron y más de una decena fueron evacuadas al desatarse un incendio este sábado en un hospital público para pacientes con coronavirus situado en el oeste de la India.
“Diez personas murieron y una resultó gravemente herida en un incendio que estalló en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Distrital de Ahmednagar”, situado en el estado occidental de Maharashtra, informó en declaraciones a la prensa el ministro de la región, Nawab Malik.
“Se trata, definitivamente, de un incidente muy serio” del que se llevará a cabo una investigación, agregó.
Al parecer, “el incendio ha sido provocado por un cortocircuito” y “había 17 pacientes en la sala COVID” en el momento del incidente que ya han sido traslados a otro centro sanitario, apuntó, por su parte, el magistrado local, Rajendra Bhosale, en unas declaraciones recogidas por el canal de noticias delhí NDTV.
El estado occidental de Maharashtra reportó en lo que va del año dos incendios en hospitales donde se trataba a pacientes con coronavirus: en el primero de ellos, el pasado 26 de marzo, al menos diez personas murieron y otras 70 fueron evacuadas al desatarse las llamas en el Hospital Sunrise, situado dentro de las instalaciones de un centro comercial al oeste de Bombay.
Un mes después, el 23 de abril, 13 personas perdieron la vida en otro incendio en un hospital para pacientes de coronavirus en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Vijay Vallabh, en la ciudad costera de Virar, próxima a la capital financiera india de Bombay, cuando el país se encontraba inmersa en una segunda virulenta ola de coronavirus.
A la semana siguiente, al menos 15 personas murieron por otro incendio en el Hospital Wellfare, en el estado occidental de Gujarat, en lo que supuso un nuevo golpe para la India en su lucha contra la pandemia en plena alza de casos.
El país ahora registra sus cifras más bajas desde el inicio de la pandemia, con casi 11.000 casos y 392 muertes en las últimas 24 horas; no obstante, el año nuevo hindú, conocido como Diwali, amenaza con aumentar las infecciones tras las reuniones familiares y las aglomeraciones que se formaron durante las compras tradiciones previas a esta celebración.
Por el descenso de los contagios, Nueva Delhi retomó el lunes pasado las clases presenciales con ciertas condiciones; el aforo al 50%, y la no obligatoriedad, después de que en marzo del año previo la llegada del COVID obligó a clausurar los centros educacionales del país.
Además de la capital india, los estados sureños de Tamil Nadu y Kerala reabrieron el lunes las puertas al los estudiantes de educación primaria y celebraron la vuelta a las aulas con canciones, según las imágenes difundidas por el canal de noticias Delhí NDTV.
Pese a que las tres regiones van a seguir implementando la modalidad de clases en línea para aquellas familias que todavía no se sienten seguras de enviar a sus hijos al colegio, el país parece tener cada vez menos miedo a la nueva normalidad.
Otras regiones indias también empezaron las últimas semanas a abrir paulatinamente sus aulas, en la mayoría de los casos solo para los estudiantes de grados superiores.