El estado de salud del senador Bernie Sanders, de 78 años, amenaza con eliminar la escena política de los Estados Unidos. El candidato presidencial más antiguo del Partido Demócrata fue operado en un bloqueo arterial en Las Vegas, Nevada, donde estaba haciendo campaña. El veterano equipo socialista se vio obligado el miércoles a suspender la participación del político en los próximos eventos planificados "hasta nuevo aviso". Esta es la segunda interrupción de su agenda electoral por razones de salud en el último mes.
La enfermedad que sufrió el demócrata Bernie Sanders, quien a mediados de septiembre también tuvo que cancelar algunos actos porque había perdido la voz, altera la imagen energética que busca proyectar en sus intervenciones y abre la puerta para que sea estigmatizado como candidato sin fuerza necesaria para liderar el país.
Lijadoras & # 39; El asesor jefe, Jeff Weaver, dijo en un comunicado que el representante del estado de Vermont experimentó "algunas molestias en el pecho" durante una ceremonia electoral el martes por la noche en Nevada. Después de someterse a varias pruebas médicas, se descubrió que tenía una obstrucción arterial y se le insertó "con éxito" dos stents – tubos metálicos de 8 a 38 milímetros de longitud y de dos a cuatro de diámetro. “El senador Sanders está hablando y de buen humor. Descansará durante los próximos días ”, explicó. La operación quirúrgica obligó al candidato a ausentarse en el debate programado el miércoles sobre la posesión responsable de armas en Las Vegas y suspender su participación en eventos planificados para hoy y mañana en Riverside, Bakersfield, Fresno y Los Ángeles, en California. En el aire está su participación en el debate televisado a mediados de octubre en Ohio, cuya ausencia podría afectar seriamente su carrera electoral.
En 2016, el médico de Sanders informó en un informe de colesterol ligeramente elevado, pero no señaló una enfermedad cardíaca, informó Associated Press. Antes del evento de campaña en Nevada, Sanders protagonizó cuatro eventos en días consecutivos en diferentes puntos de New Hampshire; El último de estos fue el lunes pasado.
Aunque son los jóvenes los que se sienten atraídos principalmente por el mensaje progresivo de Sanders, la operación reciente muestra una debilidad de la campaña: su antigüedad. Si el candidato del ala izquierda del Partido Demócrata se convirtiera en presidente de los Estados Unidos, sería el presidente más antiguo en ocupar el cargo, con 79 años. Aunque hay otros candidatos que siguen de cerca. La edad es uno de los elementos sobre la mesa durante la carrera hacia las elecciones de 2020. Cuando hay poco más de un año para votar, los tres candidatos demócratas mejor posicionados para enfrentar a Donald Trump, de 73 años, son septuagenarios. Esto hace que cualquier problema relacionado con la salud de los políticos sea más relevante de lo habitual.
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La noticia sobre la salud del veterano socialista llegó horas después de que se supo que su campaña había recaudado 25,3 millones de dólares (21,4 millones de euros) en el tercer trimestre de 2019, de más de un millón de donantes. La cifra es la más alta recibida por los aspirantes a demócratas buscando derrotar a Trump en noviembre del próximo año. Sanders aparece en las encuestas entre el segundo y el tercer lugar, siempre detrás del ex vicepresidente Joe Biden, de 76 años, que lucha con la también progresista Elizabeth Warren, de 70.
“Cualquiera que conozca a Bernie sabe la fuerza que tiene. Estamos seguros de que tendrá una recuperación completa y rápida y esperamos verlo pronto en el camino ”, tuiteó su oponente Biden después de escuchar las noticias de la operación. Warren hizo lo mismo a través de la misma red social. "Espero ver a mi amigo muy pronto haciendo campaña", publicó el candidato, quien en encuestas recientes destronó a Sanders del segundo lugar. El senador de California y también un candidato de la Casa Blanca, Kamala Harris, escribió en Twitter: "Si hay algo que sepa sobre él, es un luchador y espero verlo pronto en la campaña", escribió el senador.
Lijadoras & # 39; La edad ya era un problema cuando compitió en las primarias de su partido en 2016, cuando tenía 75 años, en comparación con Hillary Clinton, 69 en ese momento. La ex candidata presidencial también fue interrogada sobre su estado de salud cuando sufrió un desmayo en una ceremonia conmemorativa por las víctimas del ataque del 11 de septiembre.