José Manuel García, un joven mexicano de 21 años residente en Texas, murió trágicamente tras intentar salvar a una adolescente de su iglesia que se encontraba en peligro en el agua, poco después de su bautizo.
García, quien había participado en una ceremonia religiosa en un lago o piscina con su congregación local, se enteró de que una joven del grupo estaba en problemas, aparentemente arrastrada por la corriente o en pánico.
Sin dudarlo, García se lanzó al agua para ayudarla. Aunque la adolescente fue rescatada con éxito y se encuentra en buen estado de salud, García no pudo salvarse a sí mismo y se hundió en el agua. A pesar de los esfuerzos de los presentes y de los servicios de emergencia, no lograron revivirlo.
La comunidad local, especialmente los miembros de su iglesia, está profundamente conmovida por la pérdida de un joven conocido por su dedicación a la fe y su espíritu generoso. Han organizado vigilias y servicios conmemorativos para rendir homenaje a su vida y heroísmo.
Las autoridades locales están investigando las circunstancias del incidente para determinar cómo ocurrió la tragedia y si se pueden implementar medidas de seguridad para evitar que algo similar suceda en el futuro. La comunidad sigue unida en apoyo a la familia de García durante este difícil momento.