Tras la reciente derrota de su partido en las elecciones para el Parlamento Europeo, el presidente francés Emmanuel Macron anunció la disolución de la Asamblea Nacional y la convocatoria a elecciones legislativas. En un discurso nacional desde el Palacio del Elíseo, Macron explicó que esta decisión permite a los ciudadanos franceses decidir directamente sobre su futuro parlamentario. Las nuevas elecciones se programaron para dos rondas, el 30 de junio y el 7 de julio, como respuesta a la creciente preocupación por el avance de los movimientos nacionalistas y extremistas en el país, particularmente el partido de extrema derecha Agrupación Nacional, que lideró los sondeos en las recientes elecciones europeas. Macron subrayó la importancia de reafirmar los valores democráticos y proeuropeos de Francia frente a los desafíos políticos actuales, y reiteró su compromiso con la protección de Francia y su posición en Europa. Este movimiento busca revitalizar su base de apoyo y ajustar la orientación política de Francia en un momento de polarización significativa.