Alerta Climática: Pronostican una temporada de huracanes muy activa en el Atlántico para 2024

Los expertos en meteorología están emitiendo una advertencia sobre una potencialmente devastadora temporada de huracanes en el océano Atlántico para el 2024, que se caracteriza por una actividad significativamente más alta de lo normal. Este pronóstico alarmante se atribuye a una combinación de factores, incluyendo temperaturas oceánicas récord y la posible influencia de “La Niña”. Es esencial que todas las comunidades costeras del Atlántico estén debidamente preparadas para enfrentar este escenario.

Las condiciones que se están gestando sugieren un escenario propicio para la formación y fortalecimiento de huracanes mayores. Según los meteorólogos, las temperaturas oceánicas cálidas récord están generando preocupación, ya que se considera un factor clave en la formación de huracanes. Además, la presencia de viento cortante puede influir en la intensificación de estos fenómenos meteorológicos al alterar la estructura de las nubes.

Aunque la temporada oficial de huracanes en el Atlántico comienza el 1 de junio y se extiende hasta noviembre, las temperaturas superficiales del mar ya han alcanzado valores récord. Esto ha llevado a un aumento significativo en la región principal de desarrollo del Atlántico, según expertos del Centro de Predicción Climática de la NOAA.

La influencia de “La Niña” es otro factor crucial en la actividad de huracanes. Mientras que “El Niño” tiende a suprimir la formación de huracanes en el Atlántico debido al aumento del viento cortante, “La Niña” tiene un efecto opuesto, reduciendo este viento cortante y favoreciendo la creación de huracanes.

Aunque los modelos de predicción a largo plazo no pueden precisar la formación de tormentas individuales, la combinación de aguas cálidas y la influencia de “La Niña” sugiere un riesgo elevado de tormentas potentes en el Caribe y el Golfo de México.

En promedio, una temporada de huracanes incluye 14 tormentas tropicales nombradas, de las cuales 7 alcanzan la categoría de huracán. Sin embargo, este año, la combinación de aguas excepcionalmente cálidas en el Atlántico y el potencial cambio hacia “La Niña” podría resultar en una temporada aún más activa.

Es importante destacar que los modelos de predicción a largo plazo aún no pueden indicar cuándo o dónde surgirán tormentas individuales. Sin embargo, la combinación actual de condiciones sugiere una mayor probabilidad de que tormentas significativas afecten las áreas propensas a huracanes, especialmente alrededor del Caribe y el Golfo de México.