H
aya bint Al Hussein escapó de Emiratos Árabes en 2019 con sus dos hijos y mantuvo un litigio con su exmarido por la custodia de los menores.
RT.-El Tribunal Superior de Inglaterra ha determinado que el emir de Dubái, el jeque Mohammed bin Rashid al Maktum, ordenó hackear los teléfonos de su exesposa, Haya bint Al Hussein, que reside en el Reino Unido, y de varias otras personas en ese país.
Además de los de Al Hussein, fueron vigilados los teléfonos de dos de sus abogados, un asistente personal y dos miembros de su personal de seguridad. Uno de los abogados vigilados es la baronesa Fiona Shackleton, miembro de la Cámara de los Lores británica.
Según el fallo, datado del 5 de mayo pero divulgado solo este miércoles, para llevar a cabo el hackeo Al Maktum utilizó el ‘software’ espía Pegasus, de la empresa israelí NSO, que fue operado desde Dubái por «sirvientes o agentes» del jeque. Aunque el volumen total de la información robada se desconoce, los especialistas determinaron que, en una ocasión, los ‘hackers’ descargaron del ‘smartphone’ de Al Hussein 265 MB de datos, lo que equivale a 24 horas de grabaciones de audio o 500 fotografías.
Los dispositivos de las víctimas fueron vigilados entre julio y agosto de 2020, durante el litigio que Al Hussein mantiene contra su exmarido por la custodia de sus dos hijos, Jalila y Zayed, de 13 y 9 años, que actualmente viven con la madre en el Reino Unido.
La vigilancia que el jeque ejerció sobre Al Hussein no se limitó a las comunicaciones, puesto que en 2019 y 2020 Al Maktum intentó comprar una mansión adyacente a la casa de su exesposa, cerca de Windsor. Según el fallo del juez, el intento de compra de la propiedad, que costaba 41 millones de dólares, estaba diseñado para intimidar a su exmujer.
«Siento que los muros se cierran sobre mí, que no puedo proteger a los niños y que no estamos seguros en ningún sitio. Siento que ya no puedo respirar; es como si me asfixiaran», dijo durante el litigio Al Hussein.
Fugas del palacio
Haya bint Al Hussein, hermana por parte de padre del rey Abdalá II de Jordania, fue la sexta esposa de Al Maktum, que además de ser emir de Dubái también ocupa los cargos de primer ministro y vicepresidente de Emiratos Árabes Unidos. Al Hussein huyó de Emiratos Árabes con sus hijos a inicios de 2019.
No es la única esposa de Al Maktum que dejó a su marido, ya que a principios de 2020 la gimnasta azerbaiyana Sheikha Zeynab Javadli, con la que el jeque se casó en 2015, rompió el matrimonio y se mudó del palacio real a una villa para vivir junto con sus tres hijas. Posteriormente, denunció que su exmarido había orquestado una redada en su hogar, además de intentar en varias ocasiones arrebatarle a las niñas.
Asimismo, en 2018, una de las hijas de Al Maktum, la princesa Sheikha Latifa bint Mohamed al Maktoum, intentó escapar de su padre en un yate desde Omán hasta la India, pero fue devuelta a la fuerza a Emiratos Árabes. Entonces, en una grabación la princesa destacó que su hermana mayor, Sheikha Shamsa, también había tratado de huir en 2000, pero fue capturada en Cambridge por agentes que respondían a su padre. Sheikha Latifa afirmó que una vez de vuelta a Dubái, su hermana fue drogada y confinada.