Washington (EFE).- El presidente estadounidense, Joe Biden, consideró este viernes que el eventual ataque de Irán sobre objetivos israelíes llegará “más pronto que tarde” y pidió a Teherán no llevarlo a cabo.
En una intervención en la Convención de la Red de Acción Nacional, el mandatario demócrata subrayó que Washington está comprometido con la defensa de Israel.
“Apoyaremos a Israel. Ayudaremos a defender a Israel. Irán no lo conseguirá”, destacó.
Todo apunta a que EE.UU. se prepara
Este mismo viernes, la Casa Blanca consideró que las amenazas de Irán contra Israel son “creíbles” y prometió garantizar la seguridad del Estado judío en caso de un ataque de Teherán.
“Estamos dando un seguimiento muy, muy de cerca. Consideramos todavía que la amenaza potencial de Irán es real, sin duda es creíble”, dijo el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, en una rueda de prensa telefónica.
El portavoz añadió que la Administración de Joe Biden está en contacto con el Gobierno israelí para que “tengan todo lo que necesitan” para defenderse en caso de un ataque.
Estados Unidos está incrementando sus tropas en Oriente Medio para prepararse ante un eventual ataque iraní contra objetivos israelíes u occidentales, indicó este viernes el medio USA Today.
Esa ofensiva podría tener lugar “muy pronto y sin aviso previo”, añadió en su página web citando a dos altos cargos sin identificar.
El diario The Wall Street Journal había adelantado este viernes también que Israel se està preparandopara un posible ataque de Irán que podría ocurrir tan pronto como este viernes o sábado. Ese rotativo, no obstante, citó otra fuente según la cual el Gobierno iraní sigue discutiendo planes para atacar a Israel y no ha tomado una decisión final.
Irán e Israel, una tensión que vigila el mundo
Las tensiones entre Israel e Irán han aumentado después de que un ataque atribuido al Ejército de Israel contra el consulado iraní en Damasco matara la semana pasada a siete miembros de la Guardia revolucionaria iraní, además de destruir el edificio anexo a la embajada de Teherán, que era la residencia del embajador iraní.
El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, ha sostenido en las últimas horas una ronda de llamadas con sus homólogos de Turquía, China y Arabia Saudí para intentar disuadir a Irán de emprender un ataque contra Israel.
El Pentágono dijo el jueves estar monitoreando de cerca la amenaza de Irán y destacó que tomará las medidas necesarias para proteger a sus propias fuerzas.
El mismo día aterrizó en Israel el jefe del Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM, en inglés), el general Michael Kurilla, a fin de reunirse con el ministro de Defensa Yoav Gallant y otros funcionarios, para abordar los posibles escenarios que se derivan de la amenaza iraní.